Losada y Luque a su regreso ayer a Palma. Foto: TERESA AYUGA.

Un fogonazo de Losada en Las Palmas, un quiebro imposible de Luque ante el Athlétic; una vaselina milimétrica del gallego en Vitoria, un testarazo en carrera del catalán en El Insular. La irrupción de Roberto Losada en Mallorca ha provocado un cambio de dinámica, un giro en la trayectoria rojilla, una alteración en el guión. Asociado a Albert Luque, el Chino se ha convertido en el mejor amigo del gol.

Roberto Losada Rodríguez, 25-10-76. Vigo (Pontevedra). Cuando el atacante formado en Oviedo chocó de forma brutal con Molina allá por diciembre de 2000, nunca pudo imaginar que su regreso al balompié de elite sería tan brillante. Apenas se recuerda al delantero de Vigo tocando un par de balones desde que ha llegado a Ciutat, pero el Mallorca ha sacado petróleo de sus cinco golpeos: dos asistencias a Luque, una vaselina y dos remates sesgados que acabaron en la red. Todo, en apenas 100 minutos.

Atrás ha quedado el quirófano, las muletas y los meses de rehabilitación. «Las cosas me están saliendo muy bien, incluso mejor de lo que esperaba, pero los grandes protagonistas son los 25 jugadores que formamos la plantilla», dijo Losada. En la corta carrera de un futbolista hay un amplio hueco para la memoria, y seguro que el gallego nunca olvidará la ovación de la hinchada alavesista cuando fue sustituído. Cada aplauso era un recuerdo, un homenaje, un tributo al esfuerzo: «la respuesta del público ha sido para quitarse el sombrero», significó.

Albert Luque Martos, 11-03-78. Terrassa (Barcelona). La llegada de Kresic fue un alivio para el catalán y la aparición de Losada un estímulo. Convertido en la principal referencia en el área, el delantero que tuvo que esperar la salida de Tristán para convertirse en la perla del club, ya empieza a soñar con la selección. Amontona diez dianas y ha firmado cinco de forma consecutiva en los últimos partidos: «Ahora estoy en racha y espero que dure», señaló el ariete tras marcar en Vitoria. Una semana antes, sus deseos se centraban en vestir la zamarra nacional y ahora todo está mucho más cerca.

El cambio de dibujo de Kresic y la compañía de Losada le han dado mayor presencia en ataque y el catalán no ahorra elogios para su compañero de vanguardia: «Está en un momento de juego extraordinario y todos nos alegramos mucho», destacaba el de Terrassa. Albert Luque y Roberto Losada paseaban juntos por las calles de Vitoria horas antes de medirse al Deportivo Alavés. Tal vez pensaban crear una sociedad, la sociedad del gol.