Cordón de seguridad. La Policía acordonó la zona para facilitar los trabajos de extinción que se vieron obstaculizados por la cantidad de combustible que llevaba el vehículo.

Un autobús de línea, que hacía la ruta Platja d’en Bossa - Sant Antoni, quedó completamente calcinado y varios vehículos afectados por las espectaculares llamas que en torno a las 22.00 horas de ayer sobresaltaron a los vecinos y turistas que se encontraban por la calle dels Polls, en Sant Jordi, a la altura del número 37.
Las llamas arrancaron en el motor del autobús en el que circulaba el conductor con al menos un pasajero. Al advertir que las llamas iban a más abandonaron el vehículo y alertaron del incendio. Fue el propio conductor quien trató de sofocar las llamas con un extintor, pero le resultó imposible pararlo.

Según señalaron testigos presenciales, en cuestión de minutos el fuego se extendió por todo el autobús. Las lenguas de fuego eran cada vez mayores y los nervios y la tensión entre los presentes también iban en aumento, especialmente a partir del momento en el que las llamas se extendieron a la hilera de vehículos que estaban estacionados a la altura del bus siniestrado.

Hasta el escenario del pavoroso incendio se desplazaron agentes de la Policía Local de Sant Josep y de Ibiza, Policía Nacional, Guardia Civil y una primera dotación de bomberos.
En torno a las 23.00 horas, las llamas ya habían calcinado el autobús y afectado en torno a cinco turismos y otras tantas motocicletas.
La Policía estableció un cordón de seguridad para facilitar los trabajos de extinción que se vieron muy obstaculizados por la cantidad de combustible que llevaba el autobús. Las llamas también afectaron elementos del mobiliario urbano y terrazas de la zona.
Al cierre de esta edición el fuego estaba apagado y los bomberos se quedaron refrescando la zona.