La policía le sorprendió después de que se hubiera producido una nueva oleada de robos en coches que había estacionados junto a las instalaciones de GESA-Endesa, en las inmediaciones del Camí Vell de Sant Mateu, y ahora tendrá que cumplir una condena de dos años de prisión. Éste es el caso de un indigente británico que fue apresado en la tarde noche del 9 de febrero cuando unidades de Comisaría, alertadas por el incremento de este tipo de delito en la zona, capturaron a D.J.L.J.

El acusado en pocos minutos, sin embargo, causó destrozos en seis vehículos, daños que en su conjunto superaron los 2.200 euros según el cómputo final tras la acumulación de los distintos peritajes a los que fueron sometidos los coches afectados.

Gafas

El ladrón, para apoderarse de los objetos que había en el interior de los vehículos, se valía de piedras y bloques de cementos que lanzaba sobre los cristales de los coches.

Pese a los daños ocasionados, sólo pudo llevarse una radio de un coche, unas gafas de vista de otro y dos pares de gafas de sol que halló en otro de los automóviles.

D.J.L.J. fue condenado a dos años después que fuera excarcelado el pasado 17 de mayo para ser juzgado por estos hechos. Una vez ante la juez Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, terminó reconociendo la oleada de robos que se le imputaban y aceptó una sentencia de conformidad después de que el fiscal y la defensa llegaran a un acuerdo antes de que comenzara el juicio.