Busca colaboración ciudadana para demostrar quién causó su accidente de moto

«De repente, me pareció que iba a chocar y no supe qué hacer, si seguir o parar. Al final, giré el manillar y acabé en el suelo. No hubo choque, pero sufrí golpes y magulladuras y además la moto ha sufrido desperfectos. El conductor del turismo, que era un joven, no se esperó y se marchó», relató la joven.

Ana tuvo tiempo de anotar la matrícula y presentó una denuncia en la Policía Nacional. Cuando le preguntaron si había testigos, reconoció que, en esa situación y debido a los nervios y al gran susto, no pidió el teléfono a ninguna de las personas que pudo ver el accidente. Entre otros testigos, Ana recuerda cómo una taxista se paró a ayudarla y otras dos personas también se interesaron por su estado.

«Me llamó la Policía y me explicó que el propietario del coche se presentó en comisaría con su abogado, aunque no era la persona que conducía el turismo. Lo negó todo. Como no hubo un impacto entre los dos vehículos, me llamaron de la mutua y también me dijeron que no se podían hacer cargo. Me tendría que haber dejado atropellar para que me hicieran caso», lamentó esta vecina de Ibiza.
El seguro ya ha confirmado que no costeará la reparación de la moto al no haberse producido una colisión. «Al final, la que está fastidiada soy yo», reiteró Ana.

Esta joven reiteró la importancia de que cualquier persona que hubiera visto algo, pueda contactar con ella para ayudarla en esta situación. «Con que sólo una persona confirmara mi versión, ya me serviría. No sé si pudo haber un delito de omisión de socorro porque el conductor se marchó y me dejó allí. Da mucha rabia y, por suerte, no me pasó nada, pero la perjudicada he sido yo», afirmó. «Ahora es su palabra contra la mía. No hemos comenzado el verano y ya la gente hace en la carretera lo que quiere», concluyó.