SANT JOSEP. FIESTAS ILEGALES. Una fiesta ilegal en una villa de Sant Francesc invade el parque natural de vehículos. La rápida intervención de la Policía Local de Sant Josep fue vital para evitar que la fiesta fuera a mayores. Cientos de personas se congregaron en varios puntos de encuentro, donde eran recogidos por furgonetas negras. | ARGUI ESCANDON

El Consell d'Eivissa ha sacado a licitación la contratación de dos inspectores para la investigación de fiestas ilegales por valor de 42.840 euros (sin IVA). Este será el cuarto verano consecutivo que la institución insular recurra a investigadores privados para perseguir la celebración de fiestas ilegales en la isla.

La pandemia de coronavirus provocó el cierre del sector del ocio, lo que provocó un auge de fiestas ilegales en casas de campo. Fue entonces, en agosto de 2021, cuando el Consell d'Eivissa puso en marcha un plan piloto con la contratación de detectives para que provocaran un efecto disuasorio en los organizadores de estos eventos ilegales, que entonces podían ser perseguidos vía salud pública al estar en plena pandemia o por una infracción de la Ley de Actividades. En respuesta a la petición de los ayuntamientos de la isla, el Consell d'Eivissa continuará con su campaña para combatir las fiestas ilegales con la contratación de estos investigadores privados. Unos inspectores que deberán colaborar con las fuerzas y cuerpos de seguridad «cuando sus actuaciones profesionales se encuentren relacionadas con hechos delictivos o que puedan afectar a la seguridad ciudadana». De hecho, los detectives contratados por el Consell d'Eivissa el pasado verano ayudaron gracias a sus infiltraciones a desarticular una banda criminal dedicada al tráfico de drogas.

Los detectives privados consiguieron infiltrarse en 33 fiestas ilegales en Ibiza durante la pasada temporada. Con el cambio normativo aprobado a finales de 2021, los colaboradores de estas fiestas «también pagan» la sanción porque cae en todos los responsables de la celebración de estas fiestas: organizadores, propietarios de la vivienda, comerciales, colaboradores, DJs y participantes, con unas multas que van desde los 100.000 hasta los 300.000 euros.
Unas fiestas ilegales que suelen celebrarse en villas alejadas de la población a las que se accede a través de contactos, amigos, grupos de WhatsApp, páginas web… El precio de las entradas varía según el tipo de fiesta y puede ir de los 20 a los 150 euros con consumición o sin ella. Para no ser detectados, piden el pago en efectivo o con tarjeta, no con Bizum.


Plan contra taxis ‘pirata'

Una de las novedades de este verano será el despliegue de un plan de inspección a nivel insular para luchar contra el intrusismo en el transporte. Un documento que aún está en fase de elaboración pero que el Consell d'Eivissa asegura que estará listo para el inicio de la temporada.
«La novedad es que tendremos un documento que servirá de guía para tener indicadores y ver dónde hay que incidir en las inspecciones. Los inspectores y cuerpos y fuerzas de seguridad sabrán qué infracciones hay que perseguir con más medios y tendrán el protocolo jurídico para saber cómo actuar y denunciar estas infracciones», explica el director insular de Transportes, Roberto Algaba.