José Álvarez, este jueves, en el asentamiento de Sant Jordi.

El secretario general del sindicato de UGT, José Álvarez, ha visitado Ibiza con motivo de la celebración de la asamblea de delegados y delegadas donde se ha mostrado tajante en cuanto a la situación de vivienda que sufren muchos trabajadores de la isla.

En este sentido, ha exigido explicaciones directamente al alcalde de Sant Josep, Vicent Roig, tras el corte en el suministro de agua que ha sufrido recientemente un asentamiento de trabajadores temporales en Sant Jordi. «Estoy avergonzado de vivir en un país donde tengamos a trabajadores que tengan que vivir en estas condiciones», ha señalado Álvarez. El secretario general ha pedido «por decencia» y «por dignidad» a Roig que restablezca el agua o el mismo sindicato se verá en la obligación de presentar una denuncia. Un derecho que, como señala, es «básico» y que «el alcalde les ha privado».

Asimismo, Álvarez ha afirmado que detrás de esta medida se esconde racismo. «Son saharauis pero si fueran españoles no creo que tuviese la decencia de hacerlo», ha puntualizado firmemente.

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Desde el Ayuntamiento de Sant Josep han negado las acusaciones de Álvarez afirmando que en ningún momento ha habido un suministro de agua potable establecido por los servicios del ayuntamiento ni consta «ningún registro de abono en la zona supuestamente afectada».

Además de denunciar las condiciones del asentamiento de trabajadores de Sant Jordi, el secretario general del sindicato ha exigido garantías de «condiciones dignas» para todos los trabajadores de la isla en alojamiento y ha criticado duramente la «mala planificación» al permitir la construcción de nuevos hoteles pero no solucionando estas necesidades.

Asimismo, Álvarez ha recalcado el elevado coste de la insularidad en Ibiza: más del 18% respecto a la península. Un hecho que para el secretario general «no se corresponden con la mayoría de los salarios» pero que empresas y administraciones públicas «sí lo ven reflejado en sus cuentas». En este sentido, Álvarez ha vuelto a exigir el «reparto» justo de ese beneficio que «los trabajadores generan».