K De kose primera colección de la pasarela

Es Martell, en el puerto de Ibiza,  acogió este sábado por la tarde-noche una nueva edición de la pasarela Adlib. Una vez más, las 14 firmas adheridas al sello Adlib Ibiza que participaron lo dieron todo para que sus propuestas brillaran lo más posible pero la puesta en escena no acabó de ayudar. Su diseño en forma de letra ‘U’, su longitud y la música provocó que se hiciera algo más larga de lo habitual.

Todo empezó con casi media hora de retraso sobre el horario previsto cuando se escuchó la voz de la presentadora de esta edición, la periodista y presentadora de informativos Isabel Jiménez. Al principio fue como un fantasma para buena parte del público que no sabía de dónde salía hasta que en una de sus pantallas descubrieron que estaba justo en el otro lado. Luego, la periodista de Tele 5 demostró su capacidad de oratoria, su prestancia y su elegancia vistiendo un vestido de Monika Maxim para recorrer un amplio camino mientras destacaba que la moda Adlib «tiene identidad propia», recordar sus bondades y sus orígenes en el barrio de la Marina de Ibiza y concluir diciendo que «es un ejemplo de slow fashion unida al pasado, presente y futuro de la isla».

La Pasarela se celebró en es Martell, en el puerto de Ibiza. Foto: Marcelo Sastre.

Firmas de complementos

Después, dio comienzo la pasarela propiamente dicha con un primer pase de las firmas de complementos, K de Kose Kose, S72 HAT, Estrivancus, Dolors Miró Ibiza y Espardenyes Torres, que presentaron un total de seis propuestas cada una al ritmo de una versión dance de la canción ibicenca Jo tinc una enamorada.

Fue el momento para contemplar los originales sombreros y tocados de K de Kose Kose y su colección Antología Ad Libitum, los sombreros siempre elegantes y artesanales de inspiración mediterránea con toques actuales de S72 Hat, las propuestas de las firmas de espardenyes tradicionales Estrivancus Eivissa y Espardenyes Torres en distintos colores y con distintos complementos para modernizarlas o los senallons de Dolors Miró, que su colección Sentiment eivissenc volvió a demostrar su gran capacidad para dar una vuelta a estos tradicionales bolsos ibicencos.

Un espectáculo separó los bloques entre las firmas de complementos y de ropa. Foto: Arguiñe Escandón.

Firmas de moda

Tras un breve paréntesis en el que se hizo un homenaje a las tradicionales brulades de corn ibicencas con dos sonadors y un espectáculo de baile rápido, ágil y movido al ritmo de las estrofas de la canción Mares igual que tú del dúo Amaral, se dio paso a las firmas de ropa que salvo Piluca Bayarri presentaron un total de 12 propuestas cada una.

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La primera fue la gerundense Ivanna Mestres, que celebró su décimo aniversario en la Pasarela Adlib con la colección Bailando con medusas encabezada por la siempre sonriente y elegante modelo y actriz ibicenca Ana Vide. Fueron propuestas en las que predominaron los cortes en tiras en la faldas, los tejidos vaporosos, las gasas, los tules y los tejidos volátiles en colores crema, blancos y crudos.

El testigo lo cogió Virginia Vald con su colección Kenia que abrió Malena Costa, madrina e imagen de este año, con una elegante propuesta que anunciaba lo que estaba por venir, prendas inspiradas en los viajes de la diseñadora a África en vivos colores, tostados y variados con telas a las que había decidido dar una segunda vida.

Asistentes a la Pasarela Adlib. Foto: Arguiñe Escandón.

Catalina Klim de Ibiza Stones apostó en Timeless Sunset por prendas a priori sencillas, tanto para hombre como para mujer, en tonos dorados, pasteles y estampados con brillos a los que había añadido pedrerías, tachuelas y otros complementos.

La cuarta de este segundo bloque fue una de las clásicas de la Pasarela Adlib, Piluca Bayarri, quien decidió fusionar este año cinco de sus colecciones anteriores mostrando piezas muy reconocibles y con colores y armonías relativamente parecidas entre ellas.

En medio de las que muchos de los asistentes consideran las de Adlib más puro a muchos sorprendió la presencia de la colección de la joyera Elisa Pomar, Hijas pródigas de Ibiza. Una vez más, la artesana ibicenca dejó el listón muy alto con sus creaciones en oro y plata blanca, siendo además la única que se atrevió a añadir algo diferente a la pasarela abriendo su desfile con dos balladoras y un sonador ibicencos.

Finalmente, la última parte corrió a cargo de Mónika Maxim, quien honró la tradición más Adlib con Sargantana y sus piezas blancas elaboradas en materiales como el contonet, la puntilla, el bolillo o el ganchillo elaborado a mano;Ibimoda que demostró en su 25 aniversario como firma su capacidad para proponer trajes románticos perfectamente conjuntados con los calzados de Lisa López;Tony Bonet que no acabó por sorprender como otros años con Yo fémina y su propuesta de fusionar la esencia de Adlib con algunas tribus urbanas y «con las mujeres diosas, choni, pijas o independientes» y, finalmente, Vintage Ibiza, que mostró en Brave Hearts sus tradicionales propuestas de vestidos boho chic para novios y novias que tantas veces ya han mostrado en la Pasarela.