Calle del Ajuntament en Sant Joan de Labritja. | Marcelo Sastre

La puesta en marcha de la nueva contrata de recogida de basura de Sant Joan de Labritja permitirá que el municipio se sume al reciclaje de la fracción orgánica. El servicio será adjudicado en los próximos días a la empresa Herbusa SAU, que era la que lo prestaba hasta ahora y fue la única ofertante en el concurso.

El concejal de Medio Ambiente, Andreu Roig, indicó que el servicio se pondrá en marcha «seguramente después del verano», dado que primero se deberán encargar los nuevos vehículos y hacer el cambio de contenedores. El propio pliego de condiciones estipula que el servicio se empezará a prestar por la nueva contrata seis meses después de la formalización del contrato.

Actualmente la licitación del servicio se encuentra pendiente de la adjudicación y la formalización del contrato, aunque la mesa de contratación ya ha hecho la propuesta de adjudicación a la empresa Herbusa SAU.

La adjudicataria hizo una oferta económica de 1,66 millones de euros anuales (sin IVA), lo que implica que el total de la oferta durante los ocho años del contrato es de 13,28 millones de euros. El contrato establece la posibilidad de una prórroga de dos años.

Sant Joan es ahora mismo el único municipio que no dispone de contenedores para la recogida de residuos orgánicos ni a particulares ni a grandes productores. Santa Eulària tampoco cuenta con una red de contenedores orgánicos, pero sí recoge estos residuos a grandes productores.

Ambos ayuntamientos solicitaron al Consell aplazar su participación en la recogida selectiva de la fracción orgánica porque tenía pendiente la nueva adjudicación del servicio de recogida de basuras.
Mejora del servicio

El concejal de Medio Ambiente valoró que el nuevo contrato supondrá «un cambio muy grande» para el municipio. El anterior contrato era del año 2010.

Entre los cambios más importantes está la recogida de la fracción orgánica, la puesta en marcha de nuevos vehículos de recogida lateral, un aumento de frecuencia de la limpieza viaria y la recogida selectiva de envases ligeros y orgánico a grandes productores.

Roig destacó entre estos cambios la implementación de la carga lateral de contenedores «mucho más limpia al no tener que desplazar el contenedor y que además supone una reducción del mantenimiento de los contenedores al producir menos desgaste».

La empresa adjudicataria deberá instalar contenedores de reciclaje en el 70% de los puntos de recogida de basura del municipio (hasta ahora estaban en el 35%) lo que implicará que existan 63 puntos de reciclaje de plástico, vidrio, papel y orgánico.

Los técnicos municipales prevén que en 2031 el municipio recicle el 70% de sus deshechos, cuando el año pasado la tasa de recogida selectiva fue del 15%. El informe también plantea de cara a 2031 un aumento del 25% de la generación de residuos.

Otra de las mejoras la instalación de un control informatizado de la recogida de basura para poder determinar las cantidades de cada fracción recogidas en cada punto y poder así optimizar el servicio.