Las calles de la urbanización están muy degradadas. | Toni Planells

Los vecinos de la urbanización Es Melvins, cerca de Es Figueral, en Sant Carles, se han unido en asociación para hacer valer sus reivindicaciones históricas respecto a los servicios municipales de su comunidad. Estas reivindicaciones tienen su mayor peso en el suministro de agua y en la red de saneamiento. No en vano, toda esta urbanización se abastece de agua a base de camiones cisterna y sus aguas residuales van a parar en el pozo negro de cada vivienda o bloque de apartamentos.

Otras reivindicaciones de los vecinos de esta zona pasan por nombrar las calles, el continuo paso de autocaravanas y el estado de abandono del bosque colindante, «un auténtico polvorín». Así lo cuentan tres de los vecinos de Es Figueral, entre los que se encuentra Hernán Balcázar, Alfonso Pérez y Enric Metalí, estos dos últimos vicepresidente y presidente de la AA.VV. Es Figueral respectivamente.

40 años sin agua corriente
«No tenemos agua ni saneamiento, y desde hace 30 o 40 años pagamos más impuestos de los que se pagan en Madrid» explica Balcázar, mientras el vicepresidente argumenta que «pagamos los mismos impuestos que cualquiera que viva en San Carlos, Es Canar o en Santa Eulària, por lo tanto deberíamos tener los mismos derechos y los mismos servicios».

Servicios tan básicos como el abastecimiento de agua, que se sufraga con el dinero de los impuestos, tienen que ser solventados contratando camiones cisterna, a razón de entre 60 y 80 euros por viaje. «En verano tenemos que llamar al camión cada dos o tres días», asegura el vicepresidente de la AA.VV. que se encarga del mantenimiento de los bloques de apartamentos. Esto genera también un trajín de vehículos de alto tonelaje, al que hay que sumar el paso de los que se encargan de vaciar las fosas sépticas, que castiga todavía más el asfalto vetusto y desgastado de estas calles.

Calles que hasta ahora, y esta es otra de las reivindicaciones históricas de estos vecinos, ni siquiera tenían nombre. «A esta zona nunca ha llegado el correo», explica el vicepresidente, «porque no hay calles ni números y de esta manera los de Correos no vienen». Metalí apunta que ahora, por fin, las calles tendrán nombre «hasta ahora, mi calle, por ejemplo, se llama SN114». De esta manera ya se han decidido los nombres que sustituirán a la amalgama de letras y números, nombres que han tratado de respetar los nombres originales de la zona como el de la calle que sube hasta la urbanización y que se llamará calle Serra Pelosa, «porque esta zona se llama Serra Pelosa» asegura el presidente, «pero también se van a utilizar nombres de plantas autóctonas».

También explican que el problema con Correos también se va a solucionar con la instalación de un armario de buzones en la entrada de la que será la calle Serra Pelosa.

El Ayuntamiento responde
La AA.VV. Es Figueral está viendo por fin cómo el Ayuntamiento empieza a solventar las reivindicaciones históricas que vienen pidiendo desde hace tiempo. Aunque, tal vez por la experiencia de años de espera, no se lo acaben de creer hasta que lo vean. «Esta zona ha estado siempre abandonada de la mano de dios, aquí jamás había invertido nada el Ayuntamiento. Ahora parece ser que nos escuchan», aseguran.

En este sentido, el Consistorio dio un primer paso el pasado jueves en el pleno municipal al destinar 1,78 millones de euros del remanente de tesorería a dotar presupuestariamente cinco proyectos. De esta partida económica, 360.000 euros tendrán como destino las obras de abastecimiento de agua a la zona de Es Figueral.

Este proyecto cuenta con un presupuesto inicial de 650.000 euros, de los que 360.000 estaban previstos para el ejercicio 2022. Sin embargo, con la incorporación del remanente de tesorería se elimina la reserva de esta partida del presupuesto del año que viene pon la finalidad de adelantar en la medida de lo posible el inicio de las obras.

Aunque la asociación, que se creó a finales de 2019, no llega a la decena de socios por la llegada de la pandemia, Balcázar considera que «prácticamente seremos unos 100, por que en la reunión con la alcaldesa éramos prácticamente un centenar de personas».

Una visita la de Carmen Ferrer que se produjo el pasado 29 de junio para presentar el plan de la nueva red de abastecimiento de agua. De esta manera el presidente vecinal, Enric Metalí, celebra que «parece ser que antes del próximo verano nos llegará el agua, pero el tema del alcantarillado no lo tenemos tan claro». Subrayan la buena relación con el Ayuntamiento y las reuniones periódicas que tienen con el concejal de Sant Carles, Juan Carlos Roselló.

Las obras podrían empezar al finalizar la temporada
El Ayuntamiento de Santa Eulària confirma que ya hay un proyecto redactado y partida presupuestaria para ejecutar las obras de suministro de agua. «Si no pasa nada, antes de terminar el mes se habrán hecho los trámites necesarios para que pase por Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento y se aprobará», comentaban desde el Consistorio.

Tras la aprobación, el proyecto deberá pasar por Recursos Hídricos y Sanidad del Govern y, si no hay problemas, se podrá licitar. «Si no hay retrasos por este trámite en otras administraciones o no hay alegaciones a la licitación, nuestra intención es que las obras comiencen al acabar la temporada y que puedan estar terminadas en la primera mitad de 2022», explicaron desde la administración local.

En cuanto al alcantarillado Santa Eulària asegura que el primer paso ya se ha hecho con la ampliación de la depuradora, y que es un tema a solucionar tras finalizar los trabajos de la red de abastecimiento de agua.