Los promotores afirman que la negativa de bancos y cajas a financiar proyectos inmobiliarios retrasará el inicio de la recuperación del sector hasta al menos el año próximo, y no en el segundo semestre del presente ejercicio como habían previsto inicialmente, según afirmó ayer el presidente de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Balears, Gabriel Oliver.
El responsable de la patronal indicó que los niveles de 'stock' de viviendas se van reduciendo en las Islas -en estos momentos hay unos 3.000 pisos sin vender - y destacó que algunas empresas ya estarían en disposición de iniciar proyectos.
Oliver explicó que el sector también se enfrenta a un problema burocrático en la planificación urbanística que limita las posibilidades de inversión empresarial.
De acuerdo con los cálculos de la patronal, en caso de que hubiera financiación disponible, aproximadamente un 40 por ciento de los proyectos no se podrían ejecutar por cuestiones de normativa urbanística. Oliver destacó que muchos de los proyectos que requieren de juntas de compensación, modificaciones de planes generales o proyectos de urbanización están parados. Esta circunstancia supone un incremento de costes financieros para las empresas.
El colectivo organizará a partir el miércoles 15 de junio la tercera edición de 'Firastock', en la que trece empresas de las Islas comercializarán unas 400 viviendas terminadas en diferentes emplazamientos. La patronal afirma que los precios han bajado entre un 15 y un 20 por ciento.