El Govern balear quiere conseguir una tasa de empleo general del 70 por ciento en 2010 y una tasa de empleo femenino del 60 por ciento en el mismo año, con el fin de conseguir el pleno empleo y aproximar la Comunitat Autònoma a la media de empleo europea, que se sitúa en torno al 60 por ciento.

La tasa de empleo de Balears era del 50,51 por ciento en 2004, cinco puntos por encima de la media nacional, que en el mimo período estaba en el 45,09 por ciento.

Para conseguir estos propósitos la Conselleria de Treball i Formació ha elaborado un Plan de Empleo y Calidad en el Trabajo de las Balears que está analizando e intentando consensuar con las patronales CAEB y PIME y los sindicatos con mayor representación, UGT y CCOO.

El borrador del proyecto elaborado por el Govern presentado como «Acuerdo Estratégico para el Empleo y la Calidad de Trabajo, la Cohesión Social, la Competitividad y la Economía Productiva en las Islas» cuenta con cuatro apartados claramente diferenciados: Plan de empleo; mejora de la calidad en el trabajo; plan de actuación de Salud Laboral y relaciones laborales.

Entre los objetivos que figuran en el proyecto de Plan de Empleo se especifica que el aumento de las tasas de ocupación tiene que ir acompañado de un crecimiento generalizado de la productividad en el trabajo, de forma que se mantenga rentable la inversión empresarial evitando la deslocalización.

El plan permite establecer las líneas maestras estratégicas en las que inscribir las políticas activas de empleo, como un gran itinerario que cuenta, como objetivos prioritarios, con la orientación, la formación, el fomento del empleo, la seguridad y la salud, todo ello contando con una base de procesos eficientes y de dinamización de recursos en el ámbito de las Islas.

Por lo que hace referencia a las relaciones laborales se contemplan varias medidas concretas, entre las que destaca, el tratamiento de los trabajadores fijos discontinuos en el marco de la comisión mixta del Régimen Especial de Balears (REB) pero siempre en base al diálogo social y al consenso con los agentes económicos y sociales mayoritarios.

Aunque el plan todavía está en fase de elaboración los sindicatos ya han mostrado sus reticencias. El secretario de Acción Sindical y de Ocupación de UGT, Manel Pelarda, sostiene que «no aprobaremos el Plan de Empleo propuesto por el Govern si en el mismo no se refleja claramente todo lo que hace referencia con la salud laboral» y el secretario de Acción Sindical de CCOO, Baltasar Piñeiro ha apuntado que en el plan no se habla para nada de desestacionalización.

Objetivos estratégicos. Se establecen ocho objetivos: Prevención y activación; espíritu de empresa; abordar el cambio y promover la adaptabilidad; desarrollar el capital humano; aumentar la oferta de mano de obra; igualdad entre hombres y mujeres, y regularizar el trabajo no declarado.

Siniestralidad laboral. Reducir los accidentes laborales es otro de los objetivos básicos del proyecto que apuesta por promover políticas de estímulo a la contratación indefinida con prevalencia sobre la contratación eventual y la puesta en marcha de todas las actividades tendentes a reducir los accidentes.

Mujer trabajadora. El objetivo es conseguir la plena igualdad entre hombres y mujeres. Para ello se realizarán itinerarios de atención personalizada. Fomento de la actividad empresarial de la mujer y de acceso a las funciones directivas. Planificar y adecuar la inserción de las mujeres en el mercado.

Jóvenes. Por lo que hace referencia a los jóvenes se pretende crear planes de inserción personalizados, que se realizarán con los menores de 25 años, antes de que lleguen al sexto mes en situación de desempleo. Y programas de formación específica para los más jóvenes de las Islas.