Varios libios esperan en fila para comprar pan en Trípoli, ya que algunos puestos han abierto sus puertas para comenzar a repartir víveres. | Efe

Los rebeldes libios estiman que en 10 días tomarán Sirte, la ciudad natal del coronel, Muamar Gadafi. Aunque, para evitar el derramamiento de sangre de la población civil en la ciudad, los comandantes rebeldes están intentando negociar la rendición de la misma, pero no «darán marcha atrás». Respecto a las informaciones que apuntaban a una posible negociación con el régimen libio, los rebeldes han asegurado que no negociarán con el coronel y su única salida es la rendición.

El comandante rebelde, coronel Salem Mufta Al Refaidy, ha explicado que sus tropas avanzan hacia la ciudad desde el este y el oeste, y que ya están intentando negociar la rendición de la ciudad para evitar el enfrentamiento directo, no obsntante, no piensan rehuir.

Negociación

Respecto a las informaciones de medios internacionales que apuntaban a una posible negociación con el régimen de Gadafi, el oficial rebelde encargado de Finanzas y Petróleo, Alí Tarhuni, ha sido tajante: «Si (Gadafi) quiere entregarse, negociaremos y le capturaremos».

Mientras, los rebeldes intentan dar con el paradero exacto de Gadafi, quien podría estar preparando su huida a Argelia, el Consejo Nacional de Transición (CNT), órgano político de la insurgencia, ha asegurado que no se está negociando con los elementos cercanos al dictador, desmintiendo así las informaciones que aseguraban lo contrario.

Por otro lado, la Liga Arabe ha readmitido a Libia bajo la representación del CNT, después de que fuera suspendido de militancia en febrero por la represión de las manifestaciones a manos de las fuerzas de seguridad del régimen de Gadafi. Esta decisión se produjo en una reunión extraordinaria mantenida en la sede de la organización en El Cairo.