Dentro del amplio colectivo de artistas transversales que participaron el pasado fin de semana en Pronóstica, hubo algunos cuya activa labor quedó en la sombra. Tal fue el caso de Cristina de Middel (Alicante, 1975), licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Valencia (2001) y fotógrafa, que dirigió el taller de creación de disminuidos psíquicos, a la vez que levantó acta gráfica del evento. Dicho con palabras técnicas: realizó el «making of» del encuentro; además de (como el equipo de voluntarios), echar una mano en lo que hiciera falta.

Desde hace unos meses Cristina de Middel reside en Eivissa; de momento, buscándose la vida con actividades que no tienen mucho que ver con su curriculum académico, que incluye una maestría en fotografía en la University of Oklahoma (2000) y la diplomatura de postgrado en fotoperiodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (2202).

Por ejemplo, este verano ha estrado trabajando en Cas Serres como monitora con disminuidos psíquicos. «Respondía muy bien y estaban entusiasmados con todo lo que fuese plástica; eso de mancharse les encantaba», apuntó. De ahí surgió la idea del taller para Pronóstica:«El director, Pistolo me dijo que estaba buscando obras de proceso más que acabadas, que era lo que pensaba poner yo, unas fotos subacuáticas. Así que me traje a los niños, pintaron a su aire lo que quisieron y fui recogiendo todo el proceso en unas polaroids que expuse junto a la obra». «El hecho de verla colgada en un museo le daba al conjunto un sentido un poco irónico», explicó.