Lucas atrapa un balón aéreo en el partido disputado ayer entre el Melilla y la UD Ibiza.

MELILLA: 0

UD IBIZA: 1

La UD Ibiza acabó la liga como un avión. Al equipo de Pablo Alfaro le han faltado jornadas. El lamento de los puntos tontos que se escaparon por el camino. Podríamos decir muchas cosas y casi todas serían ciertas, pero no lo es menos que el debut en la categoría es excepcional. El conjunto celeste ha terminado su primer año en el fútbol de bronce como el mejor equipo de la historia de Ibiza en cuanto a puntuación. Las sensaciones que deja este equipo es que, tras el mercado de invierno, le ha cogido el pulso a la categoría cuando ya no había tiempo. Ayer derrotó 0-1 al Melilla en un campo donde pocos equipos han podido sacar algo positivo.

El conjunto celeste se volvió a poner el traje de equipo serio en el continente africano. Salió muy bien plantado al terreno de juego y le tocó sufrir ante un eival que salió a por el partido. Los norteafricanos se jugaban la primera plaza, lo tenían difícil, pero aún luchaban por ella.

Las primera media hora de juego fue casi un asedio. Héber, Menudo y Traoré obligaron y mucho a la defensa y a Lucas que estuvieron soberbios. La Udé aguantó las primeras embestidas y poco a poco se fue soltando. Hasta tal punto que, primero Raí, y, luego, Gonzalo obligaron al meta local a hacer dos auténticos paradones. Especialmente clara fue la del central que controló el balón dentro del área. El descanso llegó cuando mejor estaban los de Alfaro.

Nada más comenzar el segundo tiempo, el Melilla trenzó una gran jugada y Antonio García estrelló el balón contra el palo, fue cuestión de milímetros.

Tras este susto, el duelo entró en una fase de mucha igualdad y pocas ocasiones. El punto no le servía al los locales y el Ibiza quiso jugar con eso. Prácticamente no llegaba el peligro en ninguna de las dos porterías.

En el 71, los celestes reclamaron penalti sobre Jordi Sánchez, que había entrado en la segunda parte. El ariete fue derribado en el área, pero el colegiado no lo consideró suficiente.

Los minutos siguieron cayendo y las prisas llegaron al conjunto local. En el 90, Menudo la mandó a las nubes cuando remató solo en inmejorable posición. El Ibiza hizo pagar caro el error. En una jugada vertical, el balón le cayó a Raí que soltó un taconazo para dejar a Jordi Sánchez mano a mano con Dani Barrio. El punta no falló. 0-1 y final del partido.

La liga se le quedó corta a la UD Ibiza. Llegó a 63 puntos para quedarse a tan solo tres de los puestos de play off. Tendrán que volver a intentarlo el próximo curso, esta vez en el grupo III. Eso sí, el premio de la clasificación para la Copa del Rey deja un buen sabor de boca.