Paquillo Fernández, uno de los más grandes marchadores del mundo y un serio aspirante a medalla en los próximos Juegos Olímpicos de Pekín, finalmente no superó los problemas estomacales que sufrió el pasado fin de semana durante la Challenge de Chihuahua, y es baja para el V Trofeo Internacional de marcha que se disputa hoy en Santa Eulària. Esa noticia, en otra ocasión, hubiese supuesto un duro golpe a la cita santaeulaliense, aunque el gran nivel de la prueba hace que el impacto de ausencia sea menor. De esta forma, en la línea de salida del trofeo de marcha, que es también campeonato de Balears, habrá marchadores de la talla del mexicano Elder Sánchez, vencedor presisamente de la competición de Chihuahua; el ruso Ilya Markov, el tunecino Hatem Ghoula o los españoles Juan Manuel Molina, segundo en la cita mexicana, Mikel Odriozola, Santi Pérez o Pinardo.

Ayer, en el salón de actos del Ayuntamiento de Santa Eulària, tuvo lugar la presentación de la prueba con la asistencia de Mario Avellaneda, conseller de deportes; Toni Marí, concejal de deportes de la localidad de la Villa del Río; Mariano Riera, organizador de la prueba y una amplia representación de atletas: Eder Sánchez, Mikel Odriozola, Sonata Milusauskaite, Ferrán Casado, Luis Manuel Corchete, Jaimie Costin y Zuzana Malikowa. «Es la mejor prueba de marcha que se puede hacer en Eivissa y casi en España. Hay que agradecer el apoyo del Ayuntamiento de Santa Eulària de que esta prueba sea cada vez más grande y que opte a conseguir la Copa de Europa en un futuro, que es lo máximo a lo que podemos aspirar», asegura Mario Avellaneda.

Los atletas, muchos de ellos ya asiduos a la prueba ibicenca, reconocen que la competición es de altura, sobre todo en un año olímpico como es el actual. «Es la última oportunidad para los marchadores españoles para intentar clasificarse para la Copa del Mundo, en la que están en juego las plazas para ir a los Juegos Olímpicos. Por eso habrá que ir a tope», declara Odriozola. «Hay rivales muy duros y se espera una dura competencia con rivales como Ghoula, Markov, Molina y el resto de atletas españoles», añade Elder Sánchez.

La prueba arrancará en la calle Sant Jaume a las 15,30, con la salidas de las categorías infantil y cadete. A las 16,00 será el turno de los benjamines y alevines. Las categorías federadas saldrán a las 16,30 (masculina) y 17,00 (femenina). Hay un total de 88 inscritos.

Mario Avellaneda llevará, como es habitual en un trofeo de marcha del que es el principal promotor, el dorsal número uno, aunque el atleta y conseller de deportes reconoce que no espera hacer un buen papel. «Sé que voy a empezar la prueba, pero no sé como voy a acabar, porque no he tenido tiempo para entrenarme», asegura el atleta, que reconoció que le ha llegado el momento de parar: «Esta prueba quizá sea mi despedida y cierre a nivel de alta competición. Tal vez compita en el balear o pruebas cortas, pero nada más, porque está claro que no puedo sacar las seis ó siete horas que necesitaría de entrenamiento para estar a un buen nivel. Por eso esta prueba será mi autohomenaje y ya sea la hora de cerrar el chiringuito».

Pero, si la marcha española pierde mucho con el adiós de Avellaneda, también gana con su cargo político. «Es un lujo tener a Mario como conseller deportivo y es una garantía para que una prueba como la de Santa Eulària, que siempre ha sido buena, se haga ahora mucho mejor. Seguro que hace muchas cosas buenas por este deporte», asegura Odriozola. Por otra parte, en la prueba, además de Avellaneda, compiten otros 25 atletas pitiusos, que intentarán conseguir un buen puñado de medallas en el campeonato de Balears para las Pitiüses.