Miembros de la guarnición de la base de hidroaviones de Formentera (1936-1953). | UH

El centro sociocultural de s'Alamera (Vara de Rey) acogerá el próximo día 30 la proyección del documental Formentera: base d'hidroavions (1936-1953), dirigido por José Luis Mir y estrenado el pasado 14 de julio en Formentera. Un trabajo de la productora Deunoscuantos (Santiago Ribas, producción; Jaime Marí, cámara, y Toni Cardona, sonido), que se emitirá próximamente por IB3. «Han comprado tres pases, pero aún no me han concretado las fechas. Ya avisaremos cuando lo sepamos», apuntó ayer a este periódico el cineasta ibicenco, director asimismo de un documental sobre el hundimiento en 1938, en plena Guerra Civil, del crucero Baleares, realizado en 2006. Además, el equipo trabaja actualmente en un tercero: sobre el terrible accidente de avión ocurrido en 1972 en s'Atalaia (Sant Josep), en el que murieron sus 104 pasajeros.

La sinopsis del documental resume así el trabajo: «A final de 1936 el comandante aéreo de Balears decidió dotar a la isla de Formentera de una base eventual de hidroaviones que serviría de apoyo y avanzadilla a las operaciones militares que se realizaran en la costa meditarránea, principalmente. Durante el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, y ante la amenaza de una posible invasión militar que pudiera venir del norte de Àfrica, se realizaron una serie de obras, ampliaciones y mejoras para convertirla en una base fija y estable. A principios de los años 50, ya sin conflictos bélicos próximos que amenazasen a las Islas, fue cuando la base de hidroaviones de Formentera empieza a caer poco a poco en desuso, para, finalmente, desaparecer de manera definitiva en 1953».

«Un trabajo complicado»

El pasado mayo concluyó el rodaje de Formentera: base d'hidroavions. «Tardamos un año y medio y fue un trabajo complicado; por el tema de fotos y, sobre todo, de localizar gente, porque hablamos de una época bastante antigua y muchos han fallecido ya, son muy mayores o no querían aparecer. Luego estaba el tema de documentación, buscar en los archivos... todo un poco liante, pero salió bien», resumió Mir, añadiendo que el Consell de Formentera les ayudó «con una pequeña subvención. Ha sido el único, porque como está la cosa, todo el mundo recorta gastos. Bueno, el Consell de aquí nos dijo que nos comprarían un pequeño lote para las bibliotecas, institutos y colegios de la isla», precisó el cineasta.

En cuanto a la distribución del documental, no descartan enviarlo a algún festival, como el de Málaga o el de San Sebastián. «Pero es difícil que te seleccionen. De momento, lo pondremos en los videoclubs y por internet; aunque todavía no hemos hecho la web propia, por falta de dinero, pues el Consell de Formentera nos pagó hace unos días y estamos más bien tiesos», aseguró José Luis Mir.