REAL MADRID: Casillas (); Sergio Ramos (), Pepe (), Carvalho (), Marcelo (); Lass Diarra (); Xabi Alonso (), Di María (), Cristiano Ronaldo (), Özil (); e Higuaín ().

Cambios: Khedira () por Özil; Arbeloa () por Di María y Benzema () por Higuaín.

ESPANYOL: Kameni (); Chica (), Forlín (), Galán (), David Garcia (); Duscher (), Manu Molina (), Luis García (), Verdú (), Callejón (); y Sergio García ().

Cambios: Dídac () por David García y Àlvaro Vázquez () por Sergio García.

Àrbitro: Clos Gómez (Colegio aragonés). Amonestó a a Carvalho y Marcelo por el Real Madrid. Expulsó a Pepe por doble amonestación (56 y 61) y a Forlín (83 y 88), y por roja directa a Galán (63) tras una entrada a Cristiano .

Goles:

1-0, minuto 29, C. Ronaldo, de penalti.

2-0, minuto 83, Higuaín.

3-0, minuto 87, Benzema.

Cristiano Ronaldo decidió un tedioso encuentro con un gol desde el punto de penalti y una asistencia a Gonzalo Higuaín, que coloca líder provisional al Real Madrid, con un resultado engañoso gracias al gol postrero de Karim Benzema que aumentó la maldición del Espanyol en el Santiago Bernabéu (3-0).

El Real Madrid no encuentra continuidad en su juego. No alcanza a definir un estilo. El vendaval ofensivo del estreno europeo ante el Ajax fue un espejismo para un equipo que, en la actualidad, se basa en la lucha y en detalles de calidad que deciden partidos.

Alejado de la imagen de equipo que desea José Mourinho, el Real Madrid sigue ganando partidos, formando una base con la solidez del triunfo. El resultado acompaña y evita una crítica mayor del madridismo. De momento, se inquieta en un asiento del que solo se levanta con gestos de calidad de Ozil o Di María, o algún arranque en solitario de Cristiano Ronaldo.

El Real Madrid intentaba mandar sin éxito. Sus ocasiones surgían a cuentagotas. En la primera se lució Kameni, tras disparo de Di María con la zurda (m.7). Poco pudo hacer en los dos penaltis bien lanzados por Cristiano. Una falta recibida por el portugués al borde del área, acabó en la mano de Luis García en su lanzamiento. Marcó y tuvo que repetir por la entrada de madridistas en el área. Tampoco perdonó al segundo intento. Su gol tan deseado y perseguido por fin llegaba. Con la ansiedad rebajada debía recuperar su nivel.

Con las fuerzas igualadas Mourinho dejó un mensaje. Sacó del campo a los 'malabaristas', Ozil y Di María, para meter a Arbeloa y Khedira y apostar por un tribote en la medular -Xabi Alonso, Khedira y Lass-. El público observa y mantiene la paciencia. Ni se pronunció por la polémica surgida tras el deseo del técnico de dirigir a Portugal y poner en un aprieto a Florentino Pérez.

El hecho es que los goles le dieron la razón. El Espanyol se fue apagando y al contragolpe llegaron las ocasiones blancas. Ramos cabeceó alto tras preciso pase de Arbeloa. Kameni sacó un derechazo de Higuaín, antes de ver como el argentino sentenciaba el partido a placer tras pase de Cristiano. Benzema cerraba el triunfo revolviéndose en el área y sacando un derechazo a la red.

Asalta el liderato un Real Madrid al que defienden los números pero no el juego. Al Espanyol le sobró valentía pero le falto maldad para puntuar.