Nick Son Nick Son | Hace 2 meses

Alex HHolandés y neerlandés son sinónimos perfectamente intercambiables, tal y como muestra la acepción cuarta de la definición de la palabra "holandés" del diccionario de la RAE. Antes de hablar hay que leer e informarse.

user Piter Ibiza | Hace 2 meses

le roban y se meten en el hotel? No me creo nada.

user Jose Tur | Hace 2 meses

Dos tiros en la cabeza y listo para los guiris estos narcos. .

user Alex H | Hace 2 meses

Su nacionalidad no es Holandes. Es Neerlandes. Holandes no es una nacionalidad. Sois periodistas y no sabeis la diferencia?

user DMK | Hace 2 meses

Bravo por esas dos mujeres que se pararon a ayudar! En momentos como esos demostramos de qué estamos hechos.

user Eivissenca | Hace 2 meses

Esto es Ibiza te espetan muchos, refiriéndose a que pueden hacer lo que les venga en gana y no pasa nada. Por desgracia, se ha normalizado esta situación de "vender" y "proveer" cualquier sustancia y lo hacen sin ningún pudor, incluso en la playa a plena luz del día. Está lleno de clanes, unos serán de África, otros del Norte, otros del Este, ... La isla está repleta de individuos así, y si están es que tienen clientela y hacen dinero fácil a sacos, sean de donde sean. Si pensamos un poco, es un indicador más de la situación actual en la isla. Podredumbre que apesta.

user Joan de Sant Antoni | Hace 2 meses

El conocido hotel, paga algo a este periódico?

user destapando mentiras | Hace 2 meses

Menuda gentuzilla se nos está quedando en la isla, les deseo lo peor. Por otro lado el taxista muchas luces no tiene, porque a quién se le ocurre llamar a la guardia civil delante de los propios traficantes!,

Laura Kuenssberg Laura Kuenssberg | Hace 2 meses

discotecas, traficantes, drogas los hoteleros diran que es normal que vengan mas diran turistas drogadictos

Nick Son Nick Son | Hace 2 meses

Un incidente muy grave. Espero que los culpables reciban el castigo correspondiente. Dicho eso, fue una imprudencia por parte del taxista enfrentarse de esa manera a un grupo de tres traficantes, encima veinte años más jóvenes que él. Tuvo suerte el taxista que no sufrió consecuencias graves, pero igual le podrían haber sacado una navaja y apuñalarlo, y no estaría ahora para poder contarlo, dejando a sus hijos huérfanos y a su mujer viuda. En estas situaciones es mejor ser prudente y no involucarse en altercados con este tipo de gente drogadicta y peligrosa. Y desde luego no vale la pena jugarse la vida por cuatro duros y hacerse el héroe para morir al volante de un mísero, sucio y apestoso taxi.