Las altas temperaturas que esta última semana están afectando a las Islas han puesto en alerta a los servicios sanitarios ante la posibilidad de que alguna persona pueda sufrir un golpe de calor y necesite ser atendida con rápidez.

Los golpes de calor no son muy habituales en las Islas, la tendencia es que se produzcan dos o tres al año. Una tendencia que, sin embargo, sí que se rompió el año pasado cuando el Servei d’Epidemiologa recibió la confirmación de 15 casos.

Este año, a pesar de las altas temperaturas, de momento sólo se ha confirmado un ingreso por golpe de calor, que se produjo el pasado mes de junio en el Hospital Mateu Orfila de Menorca.

Recomendaciones

El Servei de Prevenció de la Malaltia de la Direcció General de Salut Pública i Participació ha editado carteles, trípticos e imanes, que han sido distribuidos por el IB-Salut en los hospitales, centros sanitarios, y por Creu Roja, con consejos para evitar las situaciones de riesgo tanto en casa como en la calle.

Desde el Servei de Prevenció de la Malaltia recuerdan que quienes tienen más riesgo de sufrir problemas por exceso de calor son las personas mayores de 65 años, y más si viven solas o son dependientes, los niños pequeños, las personas con patologías crónicas y las personas que trabajan en ambientes calurosos y quienes realicen ejercicio físico intenso en las horas de más calor.

El golpe de calor es una situación médica que puede ser grave e incluso moral y que se debe al aumento excesivo de la temperatura corporal por exposición prolongada o esfuerzos físicos intensos a temperaturas elevadas. Los síntomas principales son: temperatura muy elevada, piel enrojecida, caliente y seca, pulso acelerado y respiración rápida y dolor de cabeza.