La mañana de ayer transcurrió con normalidad y sin colas en el mostrador de Ryanair del aeropuerto de Ibiza. | Marcelo Sastre

La segunda y última de las dos jornadas de huelga que convocaron los sindicatos de tripulantes de cabina de Ryanair terminó ayer con 14 vuelos cancelados que tenían conexión con la Península con destino a Madrid, Barcelona, Málaga y Sevilla, es decir, los que habían sido cancelados previamente. En cuanto a los vuelos nacionales solo salieron cuatro, dos por la mañana y dos por la noche, que hicieron la ruta Ibiza-Valencia y Valencia-Ibiza con máxima puntualidad. A los 14 vuelos cancelados hay que sumar los 28 que se cancelaron durante el miércoles. Además, hubo dos nuevas cancelaciones de vuelos con conexión internacional con Venecia, cuya salida desde Ibiza estaba prevista a las 17.50 horas y a las 20.20 horas desde Venecia. Se desconoce si las causas de estas cancelaciones se deben a la huelga de trabajadores, según informaron fuentes de Ryanair.

Por tanto, en los dos días de huelga se han cancelado 45 vuelos en Ibiza.

Retraso de seis horas

También se registraron incidencias en los vuelos que conectaban Ibiza con Bruselas, especialmente el que tenía que salir desde la isla a las 06.40 horas y que acabó siendo reprogramado para las 13.10 horas, lo que supuso un retraso de seis horas y media. El que salía desde Bruselas Charleroi a Ibiza tuvo veinte minutos de retraso, así que en lugar de salir a las 9:30 horas acabó saliendo a las 9:50 horas. Así, un total de 44 vuelos con destino o salida desde Ibiza fueron cancelados durante las jornadas de huelga de miércoles y jueves, pese a que ayer la jornada transcurrió sin incidencias graves y con el funcionamiento de los servicios mínimos, según señalaron fuentes de USO, sindicato convocante en España junto a Sitcpla.

Dado que los pasajeros estaban informados de antemano sobre los vuelos que no iban a salir, durante la jornada del jueves no se registraron colas ni en los puntos de reclamación ni en los de facturación del equipaje a causa de la huelga, lo que sí ocurrió el miércoles debido a los ocho vuelos cancelados por sorpresa durante el mismo día. Todos los vuelos que no salieron el día anterior, con salida o destino a Bolonia, Milán Bérgamo, Pisa y Bruselas, acabaron saliendo ayer aunque la mayoría lo hizo con retrasos de entre diez minutos y una hora, con la excepción del que tenía que salir por la mañana desde Ibiza a Bruselas y acabó saliendo al mediodía, que registró seis horas y media de retraso.

Los sindicatos que representan a los trabajadores de cabina de Ryanair convocaron la huelga de dos días para exigir la puesta en marcha de un contrato colectivo y evitar así discriminaciones en la empresa, donde conviven distintos regímenes y figuras contractuales que benefician a la aerolínea irlandesa en tanto que abaratan los costes laborales de sus trabajadores.

Investigación

Por otra parte, el Ministerio de Fomento, a través de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), investigará la cancelación masiva de vuelos llevada a cabo por la compañía de bajo coste irlandesa Ryanair, para evitar cumplir los servicios mínimos impuestos por Fomento en la huelga de tripulantes de cabina durante los pasados días 25 y 26.

Ryanair canceló en Balears 111 vuelos quince días antes de la aplicación de los servicios mínimos, para así no tener que cumplirlos en los vuelos entre la Península y Balears.
La Direcció General de Ports i Aeroports, la Direcció General de Consum, Aviba y la Asociación de Consumidores de Balears Consubal solicitaron este miércoles que Fomento actuara de oficio «porque no es lógico lo que ha hecho Ryanair con la cancelación masiva de vuelos, que en las Islas han afectado a más de 22.000 pasajeros», coincidieron todos ellos en sus apreciaciones.