El tránsito de vehículos por el pueblo es constante. | DANIEL ESPINOSA

El Consell d’Eivissa anunció el jueves que habían hallado restos arqueológicos en la zona donde se iban a iniciar las obras de la variante de Jesús y, aunque dijeron que estaban dentro de las previsiones, admitieron no saber cómo afectarán a los plazos de las obras.
Esto ha generado «miedo» e «inquietud» entre los vecinos y comerciantes quienes reconocieron que «tampoco es nada nuevo».

En este sentido, acusaron a la máxima institución insular de «no hacer nada bien» y matizaron que, en relación a los plazos establecidos, «va a pasar lo mismo que con la carretera donde las obras duraron más que las de El Escorial».

Marilina Bonet, concejala de Jesús, admitió que temía el titular que salió en la prensa hace un par de días. «He recibido varias llamadas de vecinos mostrando inquietud por lo que pueda pasar», reconoció.

Para ella, el problema está en que el Consell «no dice nada claro cuando debería tranquilizar» a los vecinos y no generar el miedo que está empezando a generar». Se refirió así a la falta de explicaciones al respecto que les hacen pensar que haya una «posible» demora en las obras.

Sin embargo, Pepa Marí, consellera de Mobilitat, explicó que hay «muchos» trabajadores en la zona para agilizar las labores arqueológicas y poder determinar con «cuánta rapidez se puede arreglar y tapar el terreno para seguir con la carretera».

Bonet también recordó que se decidió empezar las obras de la variante antes que las de la carretera de Santa Eulària para no causar inconvenientes al CEIP Jesús aprovechando las vacaciones de verano.

El hecho de que se haya encontrado hallazgos arqueológicos hace que muchos comparen la situación con la vivida hace años con la carretera de Jesús. «Estoy viendo el mismo ‘modus operandi’ que con la entrada de Jesús y todos sabemos en lo que se convirtió esa entrada», criticó la concejala.

Asimismo, los vecinos y comerciantes del pueblo no entienden por qué el Consell, si ya estaban en las previsiones los hallazgos, da pie a que se genere, de nuevo, este debate. «Que se hayan encontrado restos arqueológicos lo retrasa todo porque encima van a seguir excavando porque no se sabe lo que hay ni la amplitud que abarca. Con esto no decimos que no haya que documentarlo, pero no es nada novedoso porque es lo mismo que se encontró en Mercadona, así que deberían darse brío», explicaron.

Críticas a la carretera

Muchas personas coinciden en la necesidad de ampliar la carretera para descongestionar el pueblo. Y es que las retenciones son habituales día sí y día también. Sin ir más lejos, ayer a las 11 de la mañana hubo una retención de más de 20 minutos desde la iglesia hasta la rotonda de salida.

En este sentido, el comercio ha sido el gran perjudicado. «Es horroroso salir y entrar del pueblo y hace que mucha gente no quiera ni acercarse y vayan a otros sitios», dijeron.

Las críticas también fueron a deparar al intenso tránsito de vehículos pesados que pasa cada día por el centro. De hecho, una trabajadora contó que el primer día que reanudaron la circulación de la carretera, un camión tuvo que subirse a la acera para permitir el paso de un autobús de línea.

A esto se suma el ruido que sufre el núcleo urbano y que genera malestar entre vecinos y visitantes.

«Cuando se hagan de una vez todas las obras que están previstas los camiones ya no pasarán por aquí y el pueblo será otra cosa. El miedo que tenemos es que nunca sabemos cuándo será eso porque llevamos cerca de cuatro años viviendo esta situación», concluyeron.