Los paradistas opinan que la ubicación provisional cuenta con un espacio «limitado».

La ubicación provisional para el Mercat Nou, en las pistas de sa Bodega, no termina de convencer a todos los paradistas que aseguran que cuenta con un espacio «reducido». Se refieren así a la falta de aparcamiento, ya limitado en la ubicación actual, que «entorpecerá» el trabajo de carga y descarga diario de los camiones.
Asimismo, hay paradistas que opinan que la reforma que se quiere llevar a cabo en el mercado actual es «excesiva», cuando «con reformar un poco el suelo, el techo y los baños ya estaría».
Tampoco entienden porque el Ayuntamiento de Vila quiere excluir a los establecimientos exteriores de la ubicación provisional, lo que supondría el cierre de alrededor de diez locales y el despido de 35 trabajadores. «En todas las reuniones que hemos tenido, en ningún momento nos han dicho que nos iban a dejar fuera», señalan desde el bar La Granja.
De hecho, su propietaria asegura que el año pasado se hizo una «votación» para saber qué paradistas querían optar al mercado provisional y «nosotros dijimos que queríamos y no se preocuparon, en ningún momento, en decirnos que estábamos excluidos».
Por ello, este bar está recogiendo firmas (ya llevan 1.000) para presentarlas al Consistorio. «Somos autónomos y nos quedamos sin nada después de 30 años trabajando aquí. Es un cachondeo». Desde este bar, también recuerdan que Vila debería preguntar quién quiere ocupar una parada en el mercado provisional porque «sabemos que hay gente que no quiere».
En este sentido, desde Vila han explicado que todavía están trabajando en el anteproyecto para la ubicación del mercado provisional. «Hasta que no esté finalizado no se sabrá, con detalle, este aspecto. Tiene que ser estudiado por los servicios jurídicos que realizan el anteproyecto», matizaron.
Renovar concesiones
En la reunión mantenida esta semana entre Vila, la directiva de la Asociación de Comerciantes del Mercat Nou y la directiva de la Pimeef, los representantes municipales explicaron que, actualmente se trabaja en paralelo en diferentes sentidos. «La prioridad es que durante los próximos meses puedan salir a concurso público las concesiones de los puestos del actual mercado por un periodo de dos años prorrogables hasta un máximo de cinco»; ya que caducaban en agosto.
Desde Vila dijeron que para realizar estas obras (tanto la del mercado provisional como la del definitivo) es imprescindible que antes esté aprobado el nuevo plan general, ya que con el plan de 1987 estos trabajos no se pueden llevar a cabo.