La visita al Consell d’Eivissa de la Consellera de Salut del Govern Balear, Patricia Gómez Picard, ha supuesto un punto y aparte en el arduo proceso de mantener la categoría de Hospital Residencia Asistida de Cas Serres.
Así lo expresó ayer el presidente del Consell, Vicent Torres, tras la mesa de trabajo que reunió al equipo de gobierno con trabajadores y la representante balear, agradeciendo su presencia, como una «muy buena noticia» ya que, a partir de ahora «queda suspendida la resolución emitida hasta el momento».

Del mismo modo, la consellera de Benestar Social de Ibiza, Lydia Jurado, manifestó la importancia en la implicación del «equipo desde Mallorca y de Patricia porque es importantísimo conseguir que se garantice el servicio» y recordó que habrá que seguir con el trabajo a nivel parlamentario para alcanzar la «proposición de ley» sin olvidar, el reconocimiento al «esfuerzo de los trabajadores del centro», así como a los usuarios.

Patricia Gómez también mencionó la importante labor de los trabajadores y expresó que «es un placer cuando las diferentes administraciones llegamos a un punto de consenso y encuentro». La consellera reconoció, además, el resultado positivo de poder explicar lo sucedido y de hablar cara a cara con los trabajadores en el encuentro celebrado ayer para avanzar en la búsqueda de soluciones, pero también se dirigió a los medios de comunicación para «pedir disculpas tanto a los profesionales como a los usuarios y residentes si se ha generado una preocupación; algo que, visto desde fuera, no veíamos necesario, y en ese aspecto no hemos estado a la altura a la hora de tomar decisiones administrativas y resolutivas que no generasen esa preocupación. También se ha generado una situación de desinformación porque, por nuestra parte, no lo hemos sabido explicar bien». Sí que ha insistido en que la resolución queda «sin efectos desde este momento debido al recurso de alzada».

Otro punto alcanzado en el consenso ha sido «cómo mejorar los servicios sanitarios, dando garantía de continuidad y de seguridad a las personas que están en la asistencia asistida» y tras buscar la «fórmula normativa» pertinente, la mesa de trabajo ha establecido ejecutar un «convenio» para ampliar el número de camas del centro para que cumpla con la categoría de hospital, así como ampliar la plantilla. En materia de obras «hay que valorarlo a nivel técnico y estudiar si las camas cumplen la normativa hospitalaria. Queremos que vengan los técnicos a valorar con actitud de ayuda, no de inspección».

Asimismo, Gómez hizo hincapié en la situación general de Ibiza en el futuro y «sabemos que tendremos necesidad de recursos sociosanitarios» porque, además de Can Misses, «tener un centro operativo para la convalecencia y curas especiales es el camino» y para ello, es necesario «establecer una normativa que se adapte lo más pronto posible, y sin necesidad de terceros. Por ello, nos ponemos a disposición del Consell d’Eivissa para llevarlo a cabo.

Es definitiva la voluntad del Consell de adaptar la residencia a una situación de hospital, pero se tiene que trabajar todavía en la autorización de servicio sociosanitarios», en relación a la parte residencial, en la que Cas Serres pasaría de «cuatro servicios sanitarios a 12 autorizados» y añadía que, desde el Consell, «prefieren mantener separada esta parte, de la de hospital de cuidados especiales a través de un convenio con el servicio de salud», siguiendo así, «los pasos hasta la autorización».

Sobre las declaraciones de la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, acerca del decreto del catalán, Patricia lamentó «tener que enterarme por los medios de su visita, cuando la semana pasada hablé con ella y me hubiera gustado reunirme con ella», y le acusó de querer «generar alarma una vez más» por un decreto que afirma, «es flexible con las decisiones adoptadas por mayoría en el Parlamento a través de una ley de política lingüística».