La Direcció General de Consum impuso el año pasado sanciones por un total de 1.341.626 euros como consecuencia de las 7.546 reclamaciones presentadas por los usuarios y de las inspecciones realizadas, 583.994 euros más que en 2016. Así le explicó ayer Francesc Dalmau, director general de Consum, en la presentación de la memoria de actividad de 2017, destacando que los sectores que más reclamaciones generan son telefonía e internet (1.614 reclamaciones), el transporte aéreo (1.282) y los servicios de ocio con 599 reclamaciones. Dalmau indicó que la parte más significativa de las sanciones (982.036 euros) deriva de las reclamaciones de los consumidores y el resto (359.589 euros) son resultado de las inspecciones. El director general insistió en la importancia de presentar reclamaciones ya que son un observatorio real del comportamiento de las empresas y contribuye a «luchar contra las prácticas abusivas y desleales de determinadas empresas». En 2017 se iniciaron 321 expedientes sancionadores y se resolvieron 241. «Aunque el número de expedientes fue similar al del año anterior, la cantidad de las sanciones ha aumentado considerablemente», añadió Dalmau. El director general de Consum destacó que, si 2016 estuvo marcado por las reclamaciones derivadas de las cancelaciones de Vueling, el crucero de Pullmantur y la cancelación del concierto de Romeo Santos, el año pasado fueron los cierres de Air Berlin (57) y Niki (17), y la suspensión del concierto de MCLAN, que generó cerca de 40 quejas. Por su parte la consellera de Salut, Patricia Gómez, recalcó que cada año se realizan más consultas por vía telemática, hasta 855 el año pasado, mientras que 4.911 se realizaron personalmente y 8.239 por vía telefónica. En total, el nú- mero de consultas ascendió a 13.790.