Las pancartas en contra de la reconversión de este centro en únicamente residencia se colgaron el pasado fin de semana. | Marcelo Sastre

Los populares alertaron ayer de que la situación «creada» por Vicent Torres y su equipo de gobierno en el Consell implica molestias para los profesionales, para los internos y para los familiares, sin olvidar que los traslados de los pacientes «congestionarán» las instalaciones de Can Misses.

«El hospital Can Misses ya de por sí está falto de personal y de medios», señaló el coordinador general del PP, Vicent Roig, refiriéndose a que los continuos traslados de enfermos en situación especial al hospital de referencia van a causar colapsos.

Cabe recordar que numerosos trabajadores de Cas Serres mencionaron este problema en la concentración que llevaron a cabo el lunes a las puertas del Consell. «Se va a saturar Can Misses y la planta sociosanitaria que decían que iban a hacer está paralizada», criticaron. «Ni de aquí a cuatro años va a estar disponible», añadieron.

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En este sentido, desde el Ib-Salut explicaron a Periódico de Ibiza y Formentera que la Unidad de Convalecencia Polivalente (UCP) del Área de Salud se encuentra en trámite de contratación de obra. «El proyecto está aprobado y la intención de la Consellería de Salut es empezar la obra durante esta legislatura».

Una obra que se encuentra dentro del proyecto de reconversión del edificio J, el viejo Can Misses, y que incluye también al Centro de Salud de Can Misses que ahora está ubicado en Vila, a las asociaciones previstas dentro del proyecto, a la reforma de la sala de autopsias del sótano y a la residencia para profesionales y familiares de pacientes que sean de Formentera, que pasará de ocho a 11 camas.

Además, «cuando se hizo el proyecto se puso en marcha la estrategia de cronicidad, por parte de la Consellería de Salut, y se decidió duplicar el número de camas, pasando de 30 a 60», añadieron.

De esta manera, el Partido Popular de Eivissa señaló que «la solución que tienen es la sumisión en el Govern de Armengol y la pérdida de autonomías del Consell como se ha podido ver en promoción turística, en transporte, en Servicios Sociales y, ahora, con la entrega de los servicios hospitalarios de Cas Serres», concluyeron.