Uno de los buses, durante las pruebas realizadas ayer en el entorno de la estación.

La estación del Cetis hizo ayer las primeras pruebas de operatividad en autobuses de «12 y 15 metros y también microbuses» con el objetivo de certificar que las obras que se han llevado a cabo en las instalaciones permiten dar luz verde a su funcionamiento. Así lo explicó Juanjo Hinojo, regidor de Mobilitat, quien confirmó que las pruebas han ido «bien» y seguirán en los próximos días para evitar que haya contratiempos porque «aún queda mucho trabajo por delante» antes de abrir la estación. Aún así, confían en que sea «lo antes posible».

De momento, se ha cambiado el sistema de circulación de los autobuses, pero aún falta por conocer la organización de las paradas. «Tenemos que concretar las paradas que habrá en la ciudad porque desde el Ayuntamiento queremos reducirlas todo lo que sea posible para molestar lo mínimo a los vecinos», matizó Hinojo quien añadió que se trata de una decisión en trámite que está negociándose con el Consell.

«Además, tenemos que mirar las plazas de movilidad reducida porque hay que desplazarlas, pero no las quitaremos porque son un servicio necesario», añadió.

Entre las mejoras del Cetis destaca la creación de una nueva sala de espera así como la mejora del sistema de ventilación y climatización.