Los restos de los 14 primeros republicanos identificados en la fosa de Porreres ya descansan en paz, junto a sus familias y en sus pueblos natales.

En la mañana de ayer el cementerio de Porreres fue el escenario de la entrega de los 14 baúles a las familias. Fue un acto en el que todos los políticos coincidieron en señalar que «llega tarde, muy tarde». En referencia al paso de 80 años desde que fueron asesinados y 40 años desde el final de la dictadura que los mantenía ocultos y silenciados.

Los familiares de las 14 víctimas siguieron con lágrimas en los ojos el sencillo y emotivo acto. Xisca Mora, alcaldesa de Porreres, fue la primera en intervenir y recordó que en este tiempo «la injusticia también ha estado con las familias». Mora señaló que «espero que a partir de ahora podáis ver Porreres con otros ojos». En representación de las familias habló Maite Blázquez, nieta de Joan Losa. Agradeció a todos los que han hecho posible la apertura de la fosa y recuperación de los restos.

La consellera de Cultura, Fanny Tur, y la presidenta del Govern, Francina Armengol, hicieron referencia al homenaje que «llega 40 años tarde. Pero hoy la democracia es menos imperfecta», sentenció Tur.

Armengol también remarcó esta tardanza y señaló que «no olvidaremos nunca esta gente que simplemente luchaba por la democracia». Y, en nombre del Govern, Armengol pidió perdón. «Las administraciones han estado años sin hacer nada, por ello pido perdón. Y a la vez, doy las gracias a las personas que durante este tiempo han luchado». Armengol recordó que el Govern denunciará ante la Fiscalía la comisión de crímenes contra la humanidad en Porreres y dijo que «el Govern seguirá en esta linea. Hay que hacer justicia con los que defendieron la tierra, la democracia, la libertad. Hemos esperado demasiados años».