Imagen de archivo de la zona de las Salinas inundada de agua tras las lluvias del pasado invierno. | DANIEL ESPINOSA

Durante el mes de agosto entraron en prealerta por sequía todas las unidades de demanda hidrológica, excepto la de Ibiza, que se mantiene en situación de normalidad, aunque también se ha constatado una bajada respecto del mes julio.

La Dirección General de Recursos Hídricos del Govern balear informó ayer sobre la evolución de las reservas de agua del Archipiélago en una nota de prensa en la que aclaró que, pese a este dato, la situación es «mucho mejor» que la de los dos últimos veranos.

Según Recursos Hídricos, estas bajadas son «lógicas» ya que durante el mes de agosto las extracciones son elevadas y las precipitaciones escasas.

De hecho, en agosto del año pasado el 40 por ciento de los municipios de Balears se encontraban en alerta por sequía y las reservas hídricas se situaban en el 41 por ciento de capacidad, mientras que ahora están al 56 por ciento, después de descender cuatro puntos porcentuales respecto del mes de julio.

Por islas, el mes pasado las reservas hídricas de Mallorca se situaron en el 57 por ciento, tres puntos porcentuales menos que julio; Menorca perdió cinco puntos, con lo que se situó en el 50 por ciento, e Ibiza descendió siete, de forma que pasó del 59 por ciento en julio al 52 por ciento en agosto. Formentera incrementó sus reservas de un 39 a un 57%.

En la mayor de las Pitiusas, a pesar del ligero descenso experimentado en agosto, el volumen de agua de sus acuíferos se encuentra 20 puntos porcentuales por encima del que tenía hace un año, cuando estaban al 32% de su capacidad. No obstante, las reservas hídricas de la isla llegaron a alcanzar el 85% de su capacidad en el mes de febrero, por lo que han caído más de 30 puntos.

Por municipios, la masa de agua subterránea del Pla de Sant Antoni, que conecta con el mar, se halla a un 78% de su nivel total, un punto menos que en julio; la de Sant Agustí ha descendido 14 puntos hasta situarse en un 47%; la de Cala Llonga pasó de un 54 a un 36%; la de Roca Llisa, del 48 al 44%; la de es Canar, del 63 al 54%; y la de Jesús, del 60 al 55%.