De izquierda a derecha, el director de la delegación de Aqualia en Balears, Eduardo del Castillo, el director de Cáritas Ibiza, Joan Marí, y el jefe de servicio de Aqualia en Ibiza, David Bernaus.

Como consecuencia de un convenio firmado hace un año, que forma parte de la política de acción social corporativa, Eduardo del Castillo, director de la delegación de Aqualia en Baleares y David Bernaus, jefe de servicio de la empresa en el municipio de Ibiza entregaron ayer un cheque al director de Cáritas Ibiza, Joan Marí, por un total de 1.747 euros con el fin de reintegrarle a la asociación el coste del recibo del agua de su sede y de los servicios que prestan para que el mismo no les suponga un coste.

Marí se mostró muy agradecido por el donativo y señaló que «no será destinado a nada específico sino para descargar gastos de cara a los usuarios», que es la finalidad del convenio.

Por su parte, Del Castillo comentó que «estamos haciendo entrega de una donación por parte de Aqualia a Cáritas de Ibiza y Formentera dentro del marco nacional que firmó la dirección general de Aqualia para colaborar devolviendo el consumo de agua que tuvieran en todas sus sedes, y colaborar con Cáritas que sabemos que es un vehículo importante de ámbito nacional para poder ayudar a familias desfavorecidas y de escasos recursos dentro del marco de nuestra política de acción social corporativa. Para que el agua no sea un coste para Cáritas en sus sedes y los servicios que prestan».

Servicio garantizado

El director balear de Aqualia afirmó a PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA que «ahora mismo el servicio está bien garantizado para todos los municipios de la isla, en Ibiza y Formentera. Tenemos la ventaja de que las desaladoras están funcionando a pleno rendimiento, la de Ibiza y la de Sant Antoni. Además, las importantes lluvias del invierno han favorecido la recarga de los acuíferos. El estado de nuestros pozos está mucho más alto de lo que estaba el año pasado en esta época. No hay ningún problema de suministro. De cara a la temporada próxima, la calidad del agua en toda la isla mejorará notablemente con respecto a la situación actual porque ya la desaladora de Santa Eulària estará a pleno rendimiento».

Con respecto a los problemas de potabilidad de Cala Vedella, Del Castillo señaló que «ahí dependemos de la puesta en servicio de la desaladora de Santa Eulària, pero eso está en manos de la Agencia Balear del Agua. Estamos pendientes de que la agencia termine las obras de mejora de la interconección y de bombeo en la desaladora de Santa Eulària para que cuando esos trabajos acaben se ponga en funcionamiento. Habrá una mejora sustancial del agua».