Tranquilo, sin apenas distraerse y acompañado de Toni Torres, el educador canino del Club Agility Eivissa, entró ayer por la tarde León, el pequeño yorkshire de José, al Hospital de Can Misses en una visita programada desde la pasada semana en la que todo salió según estaba previsto.

Menos tranquilo le esperaba su dueño, el paciente de 62 años que lleva un mes ingresado y que aguardaba con una mezcla de nervios y ganas en la sala que han instalado en la entrada del hospital con motivo del nuevo servicio ‘Dogspital’ de visitas de perros a pacientes. Se trata de un proyecto pionero en España que se enmarca dentro de la estrategia de humanización de la atención sanitaria en la que los expertos aseguran que el contacto entre el paciente y su mascota proporciona una mejora en el estado emocional, psicológico y de ánimo.

León parece que sabía lo que le esperaba y es que no era la primera vez que se paseaba por el Can Misses. Ya lo hizo hace unos días cuando su veterinario le dio el visto bueno y con el permiso del facultativo que está supervisando a José.

El reencuentro, sin duda, fue el momento más esperado por ambas partes. En el momento en el que se abrió la puerta de la sala, León abandonó la actitud tranquila con la que había llegado para tirar de la correa que le impedía saltar a los brazos de su amo. Si dicen que los ojos son el espejo del alma, los de José ayer nos mostraban la felicidad que suponen los reencuentros. Por su parte, su hija Vanessa quiso agradecer al hospital la oportunidad que les han brindado. «Ya era hora. Mi padre no se lo creía. Llevaban un mes sin verse y antes estaban 24 horas juntos», situación que junto al ingreso del paciente había mermado su ánimo. «El vínculo entre ellos es muy fuerte y confiamos en que, a partir de ahora, mejore. Estaba decaído, casi ni hablaba, pero hoy ya estaba nervioso», decía Vanessa.

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Los encuentros entre ambos seguirán programándose siempre y cuando estos no afecten a la rutina hospitalaria del paciente, en la que se respetarán sus horarios de comidas, visitas o pruebas médicas.

Desde Can Misses quieren recordar que se trata de un proyecto altruista que no ha supuesto ningún coste para la administración pública. Entre los colaboradores se encuentra el Colegio de Veterinarios de Balears, encargado de emitir el pasaporte canino que permitirá a las mascotas de los ingresados acceder a las instalaciones hospitalarias certificando que su salud e higiene sean correctas, y el Club Agility Eivissa, responsables de asegurar un comportamiento correcto.

‘Dogspital’ está abierto a todos los pacientes desde el pasado 7 de julio, día en el que se oficializó el proyecto. Ahora son los propios pacientes o sus familiares quienes, de estar interesados, tendrán que presentar su solicitud para vivir reencuentros tan emotivos como el de ayer.

A día de hoy la única visita programada ha sido la del pequeño yorkshire, pero en el hospital aseguran que es cuestión de tiempo que se vayan sumando más solicitudes.