El Consell d’Eivissa y los agentes implicados en la seguridad y el transporte del aeropuerto de Ibiza se reunieron el viernes con urgencia y acordaron aumentar la presencia de la Guardia Civil y de la Policía Local y de informadores en la terminal para intentar frenar el problema de los captadores de clientes para taxis ilegales. Al encuentro asistieron representantes el Aeropuerto de Ibiza, del Ayuntamiento de Sant Josep, Guardia Civil, Federación de asociaciones de taxistas y de la Asociación de transporte de viajeros por carretera.
La consellera Pepa Marí explicó que, dado que la problemática no puede erradicarse con controles puntuales fuera del aeropuerto, se acordó procurar una presencia continuada de Guardia Civil y Policía Local dursante la mayor parte del día, a lo largo de los meses más fuertes de la temporada turística.
Esta presencia será complementada con la asistencia de informadores, tanto de las asociaciones de taxis y transportistas como de AENA, así como incremento de las advertencias a los pasajeros.
Todas las partes coincidieron en afirmar en que la problemática existente dentro de las dependencias del aeropuerto supera las competencias de las administraciones encargadas del control del transporte de viajeros y pasa a ser una cuestión de orden público que afecta el normal funcionamiento de las instalaciones aeroportuarias.
También señalaron que se daña la imagen que se da a los turistas y «evidentemente, supone una competencia desleal para los taxistas y empresas de VTC legales de la isla», añadió la máxima institución insular.
La consellera también solicitó a AENA un incremento «notable» de agentes de seguridad en el exterior de las instalaciones aeroportuarias donde se practica la captación de clientes para el transporte ilegal.
Por su parte, el Consell mantiene a los inspectores a disposición del aeropuerto para el control y denuncia del transporte ilegal, y ha anunciado que ha mejorado la señalización, información y conexiones con transporte público y taxi legal.
«Pero todo este trabajo será insuficiente si AENA y la Dirección general del Estado no se implican más y no ponen más recursos en la mejora de la seguridad de la ‘zona tierra’ de las instalaciones aeroportuarias y en la lucha contra el intrusismo en el transporte», añadió la consellera.