Mallorca ha dejado de ser una salida para todos aquellos que no encuentran vivienda para alquilar en Ibiza. El precio de los alquileres para todo el año se han disparado y, como en Ibiza, el principal problema es que no hay oferta. Aunque no se ha llegado al nivel que se vive en la Pitiusa mayor, la situación empieza a ser dantesca para todas aquellas personas que buscan un piso para vivir todo el año. Al igual que en Ibiza y Formentera, muchos propietarios alquilan de octubre a mayo para poner los inmuebles en el mercado de alquiler vacacional durante los meses de verano.

En Mallorca se ha repetido en los últimos meses el mismo fenómeno que se vive en Ibiza y Formentera desde hace dos o tres años. Los pisos turísticos se han disparado porque es una opción mucho más rentable para los propietarios. Las inmobiliarias apenas tienen oferta de pisos de alquiler porque, de hecho, un propietario sabe que en los portales inmobiliarios pueden dar salida a una vivienda en pocas horas. «Hace tres años tardé dos semanas para alquilar una vivienda por 500 euros al mes. Ahora he alquilado la misma casa en un día y había más de setenta personas interesadas. El primero que lo vio se lo quedó. Además, he podido subir el precio», cuenta el propietario de un piso que tuvo que retirar el anuncio un día después de insertarlo ante la avalancha de peticiones de personas interesadas en alquilarle la vivienda.

Problemas en Palma

Otro propietario contó a este periódico que tenía una vivienda en el centro histórico de Palma. Con los beneficios que consigue por el alquiler vacacional paga la hipoteca del inmueble y el alquiler del piso en el que vive actualmente. «Los problemas son mínimos. Una empresa se encarga de todo, de comercializarlo, de limpiarlo, de tratar con los clientes», cuenta.

A diferencia de Ibiza, los precios para adquirir inmuebles no han experimentado la misma subida, pero parece que los incrementos serán inminentes, según algunos expertos consultados. Esta evolución en el mercado de alquiler se ha producido en pocos meses. Hace exactamente un año era muy fácil encontrar una casa para vivir en Palma todo el año, con precios más que razonable. Entonces sí que era viable marcharse a trabajar a Mallorca si no se encontraba un empleo en Mallorca pasa pasar la temporada. Ahora no es así. Casualmente, estos cambios en el mercado de alquiler se han producido desde que se viene debatiendo cómo controlar los pisos vacacionales. La directora general de Turisme llegó a declarar hace unas semanas que no era posible controlar los pisos que aparecen en webs como Airbnb o Homelidays. Todos los intentos para controlar estos pisos, con la actual Ley de Arrendamientos Urbanos, parecen abocados al fracaso.

LA NOTA

Palma oferta 6.000 pisos turísticos y hay registrados 302

Palma es, sin duda, uno de los principales focos de tensión en lo que a alquiler turístico se refiere. Según datos de la alianza turística Exceltur, los principales portales comercializan en la ciudad más de 6.000 viviendas turísticas, pero en la Conselleria de Turisme solo están inscritas 302. Esta diferencia se debe a que la mayoría de viviendas vacacionales de Palma no cumplen con los requisitos fijados en la Ley de Turismo, que prohibe el alquiler turístico en edificios plurifamiliares.

La nueva norma del Govern, en fase de estudio de alegaciones, contempla esta actividad en plurifamiliares, que dependerá del permiso de los vecinos. Este punto es uno de los que más controversia ha levantado ya que desde la asociación de apartamentos turísticos Aptur entienden que «no es viable». Además, en el caso de Palma, el Ajuntament será la principal institución con poder para regular el alquiler turístico ya que será el encargado de la zonificación de la ciudad. Para el resto de municipios será el Consell de Mallorca quien lo determine.