La falta de agentes de la Policía es uno de los principales problemas del Ayuntamiento de Vila.

El Ayuntamiento de Eivissa dispone de unos 20 millones de euros de superávit que no puede gastar para paliar la falta de trabajadores que sufren los diferentes departamentos municipales como consecuencia de las restricciones de limitación presupuestaria marcadas por el Gobierno central.

La popularmente conocida como ‘Ley Montoro’ solo permite a las corporaciones municipales destinar el remanente de tesorería para amortizar deuda y poner en marcha proyectos denominados de inversión sostenible. En este sentido, Vila ha amortizado 6 millones de euros de deuda durante esta legislatura y ha destinado 1,2 millones a inversiones que permite la ley como trabajos de asfaltado, de saneamiento o construcción de aceras. «Es lo poco que el Gobierno nos deja hacer», señala Alfonso Molina, primer teniente alcalde de Vila y responsable de las cuentas municipales.

El Ayuntamiento ha incorporado en los presupuestos para 2017 doce nuevos puestos de trabajo pero, según Molina, necesitaría en total 35 personas más para poder cubrir los servicios que demanda la ciudadanía.

Molina puso como ejemplo de la falta de personal el caso de la biblioteca de Can Ventosa, que permanece cerrada por las tardes durante la Navidad porque no tienen suficientes trabajadores para cubrir ese turno, o el del área de deportes, donde el Patronato no amplía sus actividades porque no puede contratar a más monitores.

Otro de los departamentos donde se trabaja «al límite», en palabras de Molina, es el de sanciones, ya que no hay suficientes trabajadores para realizar inspecciones y tramitar los correspondientes expedientes.

Cambios a la ley

Alfonso Molina considera que se deberían hacer «modulaciones» a la ley estatal para hacerla más flexible en el caso de Ayuntamientos económicamente saneados como el de Vila. «Nos parece muy correcto que se pongan límites para no generar déficit pero otra cosa es que nos pongan camisa de fuerza», señaló Molina.

A su juicio, no es lo mismo un Ayuntamiento con unas cuentas saneadas que otro que presenta una deuda que triplica sus presupuestos. «En Vila tenemos la fortuna de que se ha gestionado con inteligencia pero podríamos hacer muchas más cosas. La gente paga sus impuestos y es normal que demande más servicios», afirmó.

LA NOTA

Se necesitan policías, operarios y sepultureros

La falta de personal en el Ayuntamiento de Vila afecta a todos los departamentos municipales pero es especialmente acuciante en la Policía Local y en las brigadas de operarios que se dedican a las obras y a la jardinería.

Según apuntó Molina, es necesario contratar a más trabajadores incluso en los dos cementerios municipales, concretamente nuevos sepultureros.

Los presupuestos de 2017 contemplan la contratación de 8 nuevos policías.