Algunos de las personas que acudieron a la fiesta, incluyendo Pocholo Martínez Bordiu . | DANIEL ESPINOSA

No hay nada como tener buenos amigos, sino que se lo digan a Pippi Sol, a quien muchos consideran un icono fundamental de Eivissa desde hace bastantes décadas. La famosa Pippi es conocida en toda la isla ya que suele participar en eventos y fiestas, por eso, muchos no se lo pensaron dos veces a la hora de acudir al evento organizado para «rescatarla».

Bajo el título de Operación rescate Pippi Sol, publicado en Facebook, muchos acudieron el sábado por la tarde a la Boutique Hostal Salinas con la intención de colaborar monetariamente para traerla de vuelta a la isla. Entre ellos, Simone Laino, amigo suyo: «Esta fiesta es para ayudarla ya que ha tenido un problema con su pasaporte cuando volvía de viaje desde Tailandia y la han mandado directamente a su Argentina natal». Una mujer muy querida por todos en la isla, según señala Michele Signorello, también amigo y organizador del evento, «ella trae amor, luz, paz a todos desde los años 80 y está deseando volver».

Justamente, durante esta entrevista, conectamos con Pippi a través de una llamada de Skype en la que agradece la colaboración de todos los amigos y de los medios por difundir la noticia, reiterando su deseo de regresar. «Estoy rezando día y noche para poder volver a Eivissa, que para mí es una tierra santa. Yo quiero mucho a la isla y a la hermandad que hay. Además, como soy maestra de yoga, y traía muchas cosas de Tailandia y cambios para la isla», conocimientos aprendidos que espera poner en práctica tras su regreso que, si todo sale bien, podría ser ya para la próxima semana.

Con el propósito de recaudar entre 2.000 y 3.000 euros se puso un bote fuera, para las donaciones, a lo que se sumó el coste de las consumiciones que también estaba íntegramente destinado a la causa. Entre los asistentes que estaban confirmados a la fiesta figuraban nombres como Eva Pacífico, Franco Moiraghi, David Philips, The Snakeman… y el que nunca pasa desapercibido en Eivissa, Pocholo Martínez Bordiu, quien se comprometió a financiar el viaje, «si el problema es que quiere volver a Eivissa yo le pago el billete para que venga, porque la quiero aquí conmigo». Pocholo y Pippi mantienen una amistad desde hace años y, por eso, está dispuesto a asumir el coste su vuelta. Por lo que, si nada falla, Pippi podrá estar muy pronto en su isla bonita de nuevo.