La concesionaria del servicio de agua del municipio de Sant Josep, la compañía Aqualia, encontró ayer la fuga que buscaba desde hace un mes en el tramo que discurre por el torrente de ses Eres. La rotura, de un metro, corresponde a la tubería principal que conecta la desaladora de ses Eres con el pueblo de Sant Jordi, lo que provocaba una pérdida de 500 toneladas al día, lo que suponía un 30% del suministro diario.

El concejal de Aguas y Obra Pública de Sant Josep, Ángel Luís Guerrero, reconoció que desconocen desde cuando existe la fuga, aunque apuntó que podría superar los cuatro meses. «Así como está el terreno la avería está desde hace mucho tiempo», apuntó el edil, que especificó que sabían que estaba por esta zona desde hace un mes. «El 15 de diciembre cerramos el depósito de ses Eres porque teníamos que cambiar las membranas de la desaladora y aprovechamos también para acabar toda la sectorialización de Sant Jordi e instalar unos contadores, lo que nos permitió descubrir que teníamos una fuga», explicó el regidor, que reconoció que «ha sido complicado» porque la tubería pasa por un torrente y encontrar la fuga «ha sido muy difícil». «Ha sido una pérdida brutal y más tratándose de agua ya desalada», lamentó Guerrero, que visitó ayer la zona afectada junto a representantes de Aqualia.

Alrededor de diez operarios de la empresa trabajaron ayer en la reparación de la avería, que consistió en la sustitución del tramo afectado. Los trabajos provocaron el corte del suministro de agua durante unas cinco horas y media afectando a alrededor de 5.000 vecinos de Sant Jordi.

El concejal explicó que hace unos meses iniciaron un plan de búsqueda de fugas y que continuarán trabajando por si dan con más averías de este tipo.

Obras de renovación

Precisamente, el Ayuntamiento de Sant Josep ha iniciado esta semana las obras para renovar esta misma tubería, aunque los trabajos han empezado en dentro de Sant Jordi.

Esta actuación contempla la sustitución de esta antigua cañería por una nueva de 1.200 metros, que pasará bajo la calle Vicent Serra i Orvay, y que se conectará con toda la red de distribución del pueblo para dar suministro a 5.000 personas. Según el Consistorio, las obras servirán para evitar las pérdidas de agua ya que, por su mal estado, la cañería tiene un rendimiento del 35 %, uno de los más bajos de todo el municipio. Además, servirán para actuar con mayor celeridad en caso de incidencia, debido a que la tubería se trasladará a terrenos públicos, terminando con el trazado actual por terreno privado «al que se hace mucho más difícil de acceder, lo que provoca grandes pérdidas de agua y muchos retrasos en la reparación de averías», explica Sant Josep.

Las obras tienen un presupuesto total de 205.000 euros, financiados con el remanente de 2014. La empresa Aqualia se encarga de su ejecución, con una duración prevista de dos meses. En Sant Jordi también se están realizando obras de sectorialización de las cañerías, «para evitar que cuando se detecta una avería puntual se tenga que cortar lo suministro toda la población».

LA NOTA

Sant Josep, pendientes de diferentes obras de mejora de la red de agua

El mal estado de la red de suministro de agua del municipio de Sant Josep ha obligado al Ayuntamiento a invertir en esta materia para evitar las pérdidas de agua. Además de las obras de sustitución de la principal tubería de distribución de agua en Sant Jordi, el Consistorio adjudicó en noviembre dos proyectos que afectan a Sant Josep y Cala de Bou que se financiarán con el remanente de 2014.

La primera obra, que tiene un plazo de ejecución de cuatro meses, fue adjudicada a Aglomerados Ibiza, S.A. por 162.800 euros y afecta al núcleo urbano de Sant Josep, que tiene un rendimiento del 32%. El objetivo es normalizar y optimizar el suministro y crear una única canalización de salida del depósito de Puig Cardona, que actualmente cuenta con cuatro salidas. Según detallaron, los edificios conectados a esta tubería sufren grandes fluctuaciones en la presión y en invierno hay cortes de suministro ya que las bombas trabajan a menos rendimiento.

Por otra parte, la obra de Cala de Bou se adjudicó a Tecnología de la Construcción y Obras Públicas S.A. por 377.566,68 euros y permitirá sustituir la actual tubería principal de distribución, cuya antigüedad supera los 40 años. Debido a su mal estado, los vecinos sufrían continuas averías y en temporada, debían soportar variaciones de la presión, lo que repercutía negativamente en la calidad del servicio.