Santa Eulària impulsa el programa Anfitriones en el que hay excursiones a Pou des Lleó, por ejemplo. | Toni Escobar

Las nuevas condiciones para el programa de turismo social del Imserso, que contemplan una congelación de precios durante tres años y la prioridad de los hoteles de cuatro estrellas frente a los de tres, no han gustado a los hoteleros pitiusos y esto inquieta y preocupa a los dos municipios que trabajan con este tipo de turismo. En Santa Eulària y Sant Antoni trabajan en total nueve hoteles durante la temporada baja e invierno para dar servicio a este turista. Con estos establecimientos de alojamiento abiertos y la presencia del turismo sénior nacional se generan alrededor de 1.200 puestos de trabajo directos e indirectos, según los cálculos de la patronal hotelera pitiusa. Unas cifras que ni Santa Eulària ni Sant Antoni quieren perder. «El programa actualmente no deja ningún tipo de rentabilidad económica, pero somos conscientes de su importancia social. Ahora sale el nuevo programa a concurso y se deberían haber subido tres euros al día, que a no creemos que el turista sénior deje de viajar por esta subida», aseguró Gabino Canales, director del hotel Sol Pinet Playa, quien asegura que de cara a la temporada baja e invierno que viene puedan darse casos de hoteles que dejen de trabajar con este programa social debido a la falta de rentabilidad.

«Vemos con preocupación todo esto porque que los hoteleros no apuesten por el programa es un problema, un retroceso que no nos interesa. Sería muy negativo para Santa Eulària. Nosotros nos ponemos a disposición de los hoteleros para atender sus necesidades y ayudarles a llegar a los estamentos que tienen que llegar», explicó Salvador Losa, concejal de Turisme de Santa Eulària, quien afirmó que este invierno en el municipio se han ofertado 22.000 plazas hoteleras para este turismo. En esta misma línea se expresó Vicent Ribas, concejal de Turisme de Sant Antoni: «Nos hemos ofrecido a intermediar y negociar entre operadores y los hoteles, pero no hay que olvidar que son negociaciones directas entre ellos. Con un aumento de tres euros conseguiríamos que fuese rentable para los hoteles. Confió en que esta discrepancia se resuelva, que haya acuerdo y que el Gobierno sea sensible hacia un programa que crear puestos de trabajo». Ribas está a favor de líneas de bonificación e incentivos que ayuden a la apertura de estos hoteles durante el invierno, como por ejemplo, reducción de la tasa de basuras o el IBI.