Vaya verano aburrido estamos pasando en España. Me vienen a la mente muchos veranos más divertidos y repletos de noticias varias. Este verano si no fuese por los turistas haciendo balconing, sobredosis varias y los alquileres a precios astronómicos los periódicos no tendrían ni una sola noticia a la que agarrarse para poder salir a la calle. Recuerdo veranos en los que día sí y día también se hablaba de Gibraltar que era un tema muy recurrente cuando gobernaba el PP. Se hablaba de la Familia Real, del Fortuna, de las visitas que les hacían otras celebrities y royalties varias pero desde que tenemos de reina a doña Letizia, Marivent se ha convertido en un páramo informativo que no da ni para una entradilla en la página de sociedad. Este verano por no haber no hay incendios forestales ni en Galicia, incendios que llenaban los telediarios y nos recordaban que hay mucho tarado suelto y mucho político mangante. El verano no empezaba hasta que Ana Obregón hacía la croqueta o Michael Douglas nos enseñaba su casa una y otra vez, pero ya no nos queda ni eso. ¿Qué se ha hecho de las vacaciones érotico-festivas de Cristiano Ronaldo o Messi en Ibiza? Eran maravillosos esos veranos marbellíes con jeques despilfarradores, folklóricas rabiosas, Gunillas varias y Antonio Banderas y Melanie Griffith llenando tantos huecos informativos. Este agosto los informativos no dejan de hablar de Puigdemont, de Pedro Sánchez, de inmigrantes muertos en aguas del Mediterráneo, del Valle de los Caídos, de muertos en la carretera y de temas horrendos. Necesitamos descansar y volver en septiembre con las pilas puestas, que falta nos va a hacer. Mientras señores de los medios, sigan hablando como antes del monstruo del lago Ness o de las caras de Bélmez que era mucho más divertido.