Se puede ser republicano, monárquico o mediopensionista. Lo que no se puede ser es frugal, es decir, creo que no se puede ir a saludar al Rey y luego ir como un poseso al micrófono para no decir nada, como ha ocurrido con el president del Consell de Mallorca, Ensenyat, que le ha estrechado la mano al Jefe del Estado para acto seguido decirle a los medios que él es republicano, que tenía siete años cuando se votó la Constitución, por tanto él no la votó, y que le gustaría votarla y que el viernes no puede asistir a la real fiesta porque se va de viaje con su pareja, y no le queda otra porque si no va a ese viaje, su pareja se separa. Balti ha saludado al Rey con chaqueta (¡eso si que es un avance!) y después de decirle ¿cómo estás?, ha vertido a la prensa que el rey quiere tender puentes con Cataluña; o sea que le ha preguntado sobre Cataluña en vez de preguntarle por Baleares que es para lo que cobra. Por su parte la presidenta Armengol ha proclamado que Sánchez está permitiendo el diálogo del Govern balear con el Gobierno de España. Total que el rey se habrá quedado impresionado por la profundidad de la información recibida de las primeras, repito primeras, autoridades baleares. Uno que quiere un referéndum en sobre si monarquía o república y que se va con su pareja de viaje, otro que cómo va lo de Cataluña y lo de los puentes, y la tercera que es más fácil dialogar con un presidente que es de su partido. Pues Felipe VI, la verdad, se habrá ido a la regata con una información puntillosa de los muchos problemas que tienen los ciudadanos de baleares. O no tendrán ninguno.