Un Plan General de Ordenación Urbana es el documento que refleja el diseño de ciudad indicando dónde y cómo se construirán edificios, parques, calles, etc. Tras la pifia socialista del PGOU del 2009 suspendido por los tribunales, ahora vuelven a la carga con uno nuevo, en el que obvian cuestiones fundamentales sobre uno de los principales problemas de la ciudad, el aparcamiento.

Este PGO que contiene faltas de ortografía, datos sin actualizar como "aparcamiento de 500 plazas en calle Murcia", expresiones tan progresistas como "minusválidos" o "dormitorios para vagabundos", denota una redacción poco rigurosa en la que se aprecia una falta de credibilidad preocupante en sus cálculos relacionados con el aparcamiento y de los que es preciso efectuar las siguientes valoraciones.

La DEMANDA de plazas en 2015 era de 28.539 vehículos propios, a los que añadir 8.000 de turistas y los de otros municipios, por lo que podemos rondar como mínimo sobre los 40.000 vehículos que desean acceder a la ciudad en la época estival.

La OFERTA TEÓRICA de plazas la podemos dividir en base al tipo de aparcamiento como por ejemplo las 4.800 plazas existentes en la vía pública dentro del primer cinturón de ronda E-10. Otras 3.250 las encontramos en aparcamientos disuasorios, incluido el parking de es Pratet. Además, el PGOU indica que existen unas 2.967 plazas en aparcamientos existentes repartidos por toda la ciudad, y que a esto habrá que sumarle la futurible construcción de otras 3.288. TOTAL: cerca de 14.500 plazas de aparcamiento a las que hay que añadir las pertenecientes a los propios edificios de viviendas (información no disponible).

REPASANDO LOS DATOS nos damos cuenta que la OFERTA REAL de plazas es mucho menor, ya que este nuevo PGOU falsea los números de dos apartados, los parkings existentes y los previstos en construcción.

EXISTENTES: en este caso contabilizan plazas que no están a disposición de cualquier ciudadano. Por ejemplo, cuentan como existentes aquellas que dependen de otra administración como por ejemplo los aparcamientos del Recinto Ferial (actualmente ocupadas por una marca automovilística), las de aparcamientos privados (sí, privados), y los que ya han sido vendidos a particulares, como es el caso del parking subterráneo del CEIP sa Graduada. Por tanto, una vez depurados los números, pasamos de 2.967 a 1.877 plazas existentes en las que cualquier usuario pueda estacionar.

PREVISTAS: por otra parte, de las 3.288 plazas previstas en construcción debemos eliminar las destinadas a usos privados como por ejemplo las reservadas a los clientes del Parador (40), y aquellas resultantes de obras que NO SE HARÁN, como es el caso del parking en el Parque Reina Sofía (180), en la Plaza de Toros (316), etc. Por tanto las 3.288 plazas futuribles se reducen a 1.051. A su vez, de esas hay que tener en cuenta que 570 pertenecen al futuro parking de la APB, que dada la lamentable experiencia negociadora del Sr. Alcalde en el caso de es Martell, no será ni social ni barato.

A estas lógicas correcciones efectuadas en los números del PGOU, hay que añadir la ELIMINACIÓN de prácticamente TODOS los aparcamientos disuasorios existentes en es Pratet, es Gorg, zona Multicines (3 aparcamientos) y Juan XXIII, al establecerse en ellos zonas verdes, edificaciones o calle. Por tanto desaparecerán cerca de 3.000 plazas en los próximos años.

RESUMIENDO, las teóricas 14.500 plazas de aparcamiento se reducirán a unas 8.000 (+ plazas en edificios de viviendas), resultando a todas luces INSUFICIENTES para hacer frente a la demanda existente.

A estos números hay que sumar el preocupante silencio del equipo de gobierno de PSOE-GUANYEM a contestar a preguntas tan sencillas como ¿tienen intención alguna de construir aparcamientos soterrados?, ¿van a hacer algo ante el grave problema de aparcamiento? A esta falta de información se suma un sectarismo político escudado en «el centro de las grandes ciudades es peatonal» y que obvia de forma deliberada que bajo esas zonas peatonales, existen aparcamientos subterráneos. Un sectarismo que niega la posibilidad a nuestros clientes y visitantes de acceder al centro de la ciudad de una forma cómoda y ordenada, para que disfruten de nuestro patrimonio, y contribuyan a mantener un tejido comercial que da vida y riqueza a la ciudad. Un sectarismo que criminaliza el vehículo privado, sin ofrecer alternativas reales y viables, sin mejorar la morbilidad (perdón, movilidad), sin buscar opciones en el trasporte público, compartido, eléctrico o autónomo que sean factibles. Un sectarismo que en definitiva, está hundiendo la ciudad.

Para finalizar formulo varias preguntas sobre una frase que ilustra el dogmatismo urbanístico en el PGOU para que el Sr. Alcalde Rafa Ruíz explique su opinión al respecto «Es decir, debe dificultarse la oferta de aparcamiento en destino para los vehículos exteriores al residente en Eivissa». ¿Es así como promociona la Capitalidad de la Isla? ¿Es así como pretende cuidar del turista? ¿Esto ayuda o perjudica al comercio? 14 meses y bajando…