Ver arder un terreno en pleno centro de Vila es una sensación difícil de explicar. Que la noticia sea portada en muchos canales de televisión nacionales demuestra la gravedad del asunto, pero lo que ahora intriga, lo que creo que debe llegarse hasta el final, es saber qué ha pasado con la limpieza del solar. Los propietarios aseguran que el Ayuntamiento de Vila les ha prohibido siempre limpiar estos solares, que no negaremos que son golosos para construir pisos en un futuro. Dicen que les multaron por ello. Estaría bien que además de publicar caricaturas pasando por caja también hiciesen pública dicha multa, con documentos. Le daría mucha más credibilidad a la propiedad que chistes sin gracia en prensa. Pero lo que es curioso es que el Ayuntamiento de Vila también tiene una parte de dichos terrenos. En concreto, uno 5 por ciento. Por lo tanto, es también corresponsable de cómo se encuentra la zona, que teóricamente es tan valiosa desde el punto paisajístico que todos, absolutamente todos, han ignorado durante mucho tiempo y lo tenían como un vertedero repleto de ratas y mosquitos. No creo que la actuación municipal sea muy diligente con los solares que son de su propiedad. Recuerdo que una vez denunciamos el mal estado de un solar en Platja d’en Bossa. Al cabo de unos días pasó por allí una máquina y limpió el solar. Pusieron vallas y todo. Hace meses que las vallas cayeron parcialmente y el solar está lleno de maleza. Está casi tan mal como cuando se denunció. Interés municipal, cero. Por lo tanto, me alegro que el Ayuntamiento de Vila se preocupe por la limpieza de los solares de otros, pero que empiece a aplicarse la norma. Porque parece que, con el tema de ses Feixes, alguien está ocultando algo.