El marroquí M.E.G., de 19 años de edad, ha sido condenado a dos años de prisión por un delito de robo con fuerza en casa habitada. Según la sentencia, dictada por la titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, Martina Rodríguez, el 15 de marzo el condenado escaló por un edificio de calle Músico Fermín Marí hasta llegar a la terraza de una vivienda del segundo piso. Corrió la puerta acristalada y entró la casa, donde estaban durmiendo la esposa del dueño de este domicilio y la hija de ambos.

Allí, según la sentencia, el condenado sustrajo 34 euros en efectivo, un ordenador portátil, una cámara de fotos, una videocámara, un reloj y dos teléfonos móviles, todo ello tasado en 1.007 euros. Los propietarios reclaman una compensación por los objetos robados, pues, al parecer, no han podido ser recuperados. El condenado tendrá que indemnizar a esta familia por el valor de los objetos y con 34 euros más por el dinero sustraído.

El día del juicio, el Ministerio Público solicitó la misma pena que finalmente ha impuesto la juez.

El joven ha permanecido en prisión con carácter provisional desde el día que fue detenido, once días después de haber cometido el robo. Ahora en la sentencia se acuerda su puesta en libertad, aunque ahora ya cuenta con antecedentes penales.