Imagen de la droga denominada tubici, un estupefaciente de colores vivos.

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Madrid a nueve miembros de una organización dedicada a producir y distribuir tucibi, una novedosa droga sintética conocida también como la «droga de la élite», que se presenta generalmente en polvo o pastillas de colores llamativos.

Parte de los arrestados tenían previsto desplazarse hasta la isla de Eivissa para la ‘campaña de verano’ en locales de la isla.

En la operación se han desmantelado, en las localidades madrileñas de Getafe y Arroyomolinos, dos laboratorios de producción y adulteración de estupefacientes y se han intervenido varios kilos de cocaína, además de metanfetamina, ketamina y sustancias de corte, ha informado la Jefatura Superior de la Policía Nacional en Madrid en una nota de prensa.

Droga de colores

Las investigaciones se iniciaron a raíz de detectar en España un aumento en la distribución de una droga de colores vivos conocida como 2CB, tucibi o simplemente tuci, de gran aceptación entre la población de origen colombiano.

Las primeras indagaciones llevaron a los agentes hasta la localidad madrileña de Arroyomolinos, desde donde al parecer operaba una organización que se dedicaba a elaborar y distribuir estupefacientes.

Una vez centradas las pesquisas sobre la organización detectada al sur de Madrid, los agentes identificaron tres núcleos dentro de la misma, unidos entre sí por vínculos familiares o afectivos.

Al frente de la primera de estas células estaba una pareja colombiana afincada en Arroyomolinos que, con la participación de varios empleados, controlaba las actividades relacionadas con el tráfico de cocaína. También se comprobó que el grupo disponía de un laboratorio para adulterar esta droga en una vivienda de Getafe, vigilado permanentemente por alguno de sus colaboradores.

La segunda unidad estaba integrada por tres personas, un hombre y dos mujeres, también de origen colombiano, que gestionaban otro laboratorio donde elaboraban tucibi de manera artesanal, para posteriormente comercializarlo en discotecas y locales de ocio de Madrid, Málaga, Alicante y Eivissa. Para la distribución utilizaban el sistema conocido como ‘delivery’, un método cada vez más utilizado por los pequeños y medianos traficantes en los barrios de Colombia, y que consiste en el reparto bajo pedido de la cantidad exacta de estupefaciente a un lugar convenido previamente.

De esta forma los distribuidores no acumulan cantidades importantes de droga, evitan incautaciones importantes por parte de la Policía y pueden alegar que es para consumo propio, según las mismas fuentes. El tercer grupo se dedicaba a la organización --sin las autorizaciones o permisos administrativos pertinentes--, de eventos musicales en diferentes locales públicos de Madrid e Ibiza, con el objetivo de promocionar el consumo de tucibi.

De hecho, parte de los beneficios obtenidos con el narcotráfico, los habían blanqueado recientemente con la adquisición de una propiedad cerca la ciudad de Móstoles.