Carmen Fano, Virginia Marí y Silvia Casanovas, ayer momentos antes de presentar el informe de Unicef en el Centre Juvenil C-19 de Eivissa ante unas 15 personas. g Foto: DANIEL ESPINOSA

Uno de cada tres niños y niñas viven bajo el umbral de la pobreza en Balears. Este es el escalofriante dato que se extrae del informe ‘La Infància a les Illes Balears 2014’ presentado ayer por Unicef Comité Balears en el Centre Juvenil C-19 de Eivissa, donde intervino la alcaldesa de Vila, Virginia Marí, además de la coordinadora de Unicef Comité Balear y autora del mismo, Silvia Casanovas, y la presidenta de Unicef Comité Eivissa, Carmen Fano.

En el contenido del informe, Unicef alerta con cifras de fuentes oficiales que el 31,4 por ciento de los niños y niñas de Balears están en riesgo de pobreza –referido a familias con ingresos inferiores a los 17.040 euros anuales–. El estudio también arroja que en 2013 un 60% de los hogares tuvo ingresos inferiores a la media nacional, «lo que significa que uno de cada tres se encuentra en riego de pobreza infantil», señaló durante su intervención Silvia Casanovas, quien precisó que el indicador Arope, sobre pobreza y exclusión social, sitúa esta amenaza en Balears en un 38%, «un valor bastante elevado».

En cuanto al sistema educativo, Balears roza un 30% de abandono escolar que se agudiza en las Pitiüses y que Carmen Fano achaca a «la estacionalidad laboral y la influencia turística». «En los meses de turismo hay muchísimo trabajo y en nuestra juventud, que de por si está un poco desanimada, piensan que para qué van a estudiar si en verano se sacan tal o cual dinero», indicó la delegada insular de Unicef.

El informe también revela que en el Archipiélago se supera la media estatal de otro indicador como es el de sobrepeso y obesidad, o el de carencias materiales en la infancia, con un 14,8% frente al 5% del promedio en el conjunto de España.

«En el municipio de Vila se detectan familias con dificultades para afrontar gastos en temas de vivienda», indicó Casanovas, que explicó que en Sant Antoni se prestó atención durante 2013 a cerca de un millar de unidades familiares. En este sentido, un estudio publicado por el Centro de Estudios Económicos de Tomillo en 2013 sostenía que la inversión en Balears había descendido un 10% desde 2007.

Otro de los indicadores apunta al elevado consumo de sustancias tóxicas en las islas. En 2010 casi un 20% de los jóvenes entre 14 y 18 años declaró haber consumido cannabis, dos puntos más que la media nacional.

Compromisos y recetas

A través de los diferentes compromisos que Unicef ha adquirido con administraciones como las de Vila, Santa Eulària o Formentera se busca «que pongan a la infancia en el primer plano de sus políticas; que haya estrategias y garantías de sostenibilidad; la puesta en marcha de un equipo técnico para el seguimiento de estos indicadores; así como velar por los colectivos de mayor vulnerabilidad».

El informe también recoge testimonios de jóvenes como los de Santa Eulària que, como explicaron Casanovas y Fano, mostraron una «especial sensibilidad» respecto a niños de cualquier parte del mundo en situación de riesgo.