La Cala de Sant Vicent, Puig de Missa, Cala d’Hort, Benirrás y su roca, Santa Gertrudis, ses Salines, Sant Josep de sa Talaia, Dalt Vila o Plaza ajardinada de la Paz son los nombres que el poeta sevillano Juan Sebastián ha elegido para algunos de los poemas que forman parte de su último libro, El amante sutil. Un poemario compuesto por un total de 19 piezas, todas ellas dedicadas a Ibiza, Formentera y sus paisajes.
«Esto no es un libro de poemas, sino un capricho. Una obra dedicada a mi mujer, en la que hablo de los paisajes de Ibiza, pero donde la que le da importancia a todo es su presencia. Una edición muy corta, de 200 ejemplares, que no tengo previsto poner en venta», explicó Juan Sebastián.
El amante sutil es un título que el autor ha elegido para referirse a la evolución del amor conforme avanza la edad de los amantes. «Sutilmente sigue existiendo la misma pasión; aparentemente no, pero aparentemente sí».
Sebastián se ha convertido a lo largo de los años en un turista asiduo a la isla, pues reside en Sevilla, pero tiene familia en Ibiza. «Comencé a escribir el primero de los poemas, Las Dalias, hace 3 años y a partir de ahí fue surgiendo este libro». Un regalo dedicado a su mujer con motivo de las bodas de oro del matrimonio. «En lugar de un ramo de rosas, decidí regalarle este ramo de sonetos dedicado», indicó el poeta.
El autor ha intentado describir «una Ibiza que no es la popular, la que se conoce, la de la fiesta y las discotecas. Sino una Ibiza más íntima y cercana a las vivencias y a la realidad, una isla que también merece la pena que se descubra».
Este poeta de 75 años nació en Barcelona, aunque asegura que es oriundo de Peñaflor, Sevilla; es diplomado en Enfermería y ha publicado varios libros, algunos de ellos cuentan con reconocidos premios. Sebastián destaca de manera especial el poema Dalt Vila de El amante sutil, dedicado a Miguel Ángel González, «secular amante y cantor de Ibiza» y afirma que le gustaría presentar el libro en la isla y hacer una lectura del mismo, de su propia obra.
Un poemario más que le regalan a la presumida isla de Ibiza, «la isla dulce» como la define Juan Sebastián, que cuando más le gusta «es en otoño, con sus colores dorados y esos caminitos y paisajes en Sant Josep, Sant Antoni o Santa Inés». Para el poeta, Ibiza, «además de las preciosas calas que tiene, estéticamente tiene algo que acaricia mucho, es la Ibiza que yo veo, una ibiza dulce».
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